Con nueve días de anticipación a la marcha conmemorativa del 2 de octubre, los anarquistas “infiltraron” a la policía de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal y revelaron sus claves de comunicación interna, armamento que utilizan, equipo de protección y hasta los esquemas de contención y ataque.
Los anarquistas se propusieron conocer a detalle a su enemigo para saber sus puntos vulnerables y ahí atacarlos. Lo consiguieron.
Icela Lagunas