Lo que surgió como cábala y una moda de inspiración, surtió efecto de gran trascendencia. Pero los Red Sox no pensaron quedarse por siempre barbones y tuvieron que despedirse de ese look de campeonato.
Auspiciados por una marca de productos para afeitar, el Jugador Más Valioso de la Serie Mundial, David Ortiz, acompañado de Shane Victorino, se rasuraron la barba que les dio fe para alcanzar el título de las Grandes Ligas.
Indigo Staff