No se trató de un dejavú, pero sí fueron los mismos héroes sobre el campo los que le dieron una nueva gloria al futbol mexicano.

Respondón y con el mérito completo, México se coronó campeón Sub 20 de la Concacaf al vencer 3-1 a Estados Unidos en el Premundial celebrado en Puebla, destacando una vez más las actuaciones de Julio Gómez y Jorge Espericueta, como sucedió en 2011.