Si el fabricante Pirelli ya estaba en el ojo del huracán por la calidad de los neumáticos surtidos a las escuderías de Fórmula Uno, ahora sus problemas aumentarán tras lo vivido en el Gran Premio de Gran Bretaña.

Lewis Hamilton, Felipe Massa, Jean-Eric Vergne y Sergio Pérez, vieron cómo en plena carrera, la rueda trasera izquierda de sus bólidos se desintegraba, costándoles posiciones o incluso, como en el caso de “Checo” abandonar la carrera.