No solo en seguridad pública Peña Nieto pinta su raya con Calderón. También lo hace en energía al bajar en casi 200 mil millones de pesos el presupuesto para proyectos clave de la administración saliente de Pemex.

Las reuniones de trabajo que sostuvieron durante la transición el actual secretario de Hacienda, Luis Videgaray, con su antecesor y hoy canciller, José Antonio Meade, se reflejan hoy en los proyectos estratégicos de la paraestatal.

El gobierno de Enrique Peña Nieto se perfila hacia un gabinete energético que impulsará la actividad privada en Pemex y la explotación a gran escala del shale gas.

El brazo más visible en esta campaña será el economista Emilio Lozoya Austin, quien desde la dirección general de Petróleos Mexicanos impulsará el proyecto de shale gas, como lo hizo desde la campaña presidencial y la transición de gobierno.

La baja producción petrolera en los últimos 5 años impidió que se cumpliera con el Programa Sectorial Energético de este sexenio.

Una revisión realizada por el Centro de Estudios de las Finanzas Públicas (CEFP) de la Cámara de Diputados da cuenta de lo inalcanzable de este objetivo.

Lo inalcanzable de los objetivos contrasta con los discursos oficiales. En el documento se establece que la caída se dio durante la administración de Felipe Calderón.

Petróleos Mexicanos sabía desde 1983 que el proyecto de explotación a gran escala en el yacimiento de Chicontepec sería un fracaso.

Lo sabía también Felipe Calderón en el 2003, cuando era secretario de Energía y en ese año Pemex admitió a la Securities and Exchange Commission, órgano regulador del mercado de valores de Estados Unidos, que las reservas en la zona son muy inferiores a las que habían anunciado. 

Chicontepec, la apuesta petrolera en tierra firme, de Felipe Calderón, no sólo es un fracaso, es el único yacimiento en explotación en el mundo que genera pérdidas.

En el gobierno de Calderón un barril de mezcla mexicana de petróleo ha llegado a costar un promedio anual de 101 dólares en el mercado internacional.

Chicontepec no lo refleja: tiene más de mil pozos parados y ha generado pérdidas por 18 mil 331 millones de pesos desde 2007, según datos de Hacienda.