La necesidad y la pobreza parieron la tragedia que cobró la vida de siete migrantes mexicanos que murieron asfixiados dentro de la caja de un tráiler, cuando aspiraban a ingresar ilegalmente a Estados Unidos. En su patria no encontraron la posibilidad de vivir bien y murieron en el intento de una vida mejor.
Junto a ellos, al menos un guatemalteco también entregó lo más preciado en la búsqueda de “El Sueño Americano”, según lo confirmó el fiscal federal para el Oeste de Texas, Richard L. Durbin.
J. Jesús Lemus