Cuando parecía que la “pipa de la paz” había sido “fumada”, los problemas no terminaron para la Liga MX.
Convulsionado por la huelga de árbitros la semana anterior, precedida de conductas violentas tanto dentro como fuera de la cancha en anteriores semanas, el campeonato mexicano continúo con hechos que hicieron mecer los cabellos a sus directivos y pusieron en jaque el “borrón y cuenta nueva” con el que se reanudó el Clausura 2017.
Juan Reyna Loa