Hasta 10 años de prisión. 3 mil 650 días. 87 mil 600 horas.
Esa es la sentencia que persigue a Rosina González.
Ella es una joven poblana que desde hace seis años participa de lleno en la organización ambientalista Greenpeace.
El pasado primero de marzo, burló la seguridad de la torre de Pemex en Veracruz y junto a cinco de sus compañeros subieron al edificio y desplegaron una enorme manta con la imagen del presidente Enrique Peña Nieto, manchado de petróleo.
“¿Saving México?”, decía la lona.
Armando EstropMéxico se ha convertido en un paraíso para contaminar.
Para la organización ambientalista Greenpeace, los intereses corporativos, favorecidos por malas decisiones de gobierno han puesto en riesgo la biodiversidad del país.
Con la intención de evidenciar esto, durante dos semanas, el barco Rainbow Warrior navegará por aguas nacionales.
En su página de Internet, Greenpeace advierte que a bordo del barco exigiran al gobierno mexicano que conduzca al país hacia la sustentabilidad.
Indigo Staff