La ola ciudadana que España vivió en las elecciones regionales podría perder fuerza rumbo a las votaciones generales.

Los nuevos partidos que surgieron de movimientos civiles, como Podemos y Ciudadanos, debilitaron en las votaciones locales del 24 de mayo a los principales partidos españoles, el Popular (PP) y el Socialista Obrero Español (PSOE).

Con alianzas, candidaturas ciudadanas debilitaron a los partidos tradicionales en las elecciones locales, un fenómeno que podría reproducirse en las votaciones nacionales.

Esto ocurrió durante las elecciones locales de España, donde este fin de semana activistas y nuevos partidos ciudadanos arrebataron el poder a los políticos “de siempre” en ciudades clave, como Madrid y Barcelona. 

“Vuelco histórico en las elecciones municipales y autonómicas que anticipa un nuevo escenario político en España”, se lee en el diario El País. 

Pese a que el partido gobernante, el Partido Popular (PP), fue el más votado en los comicios locales que se celebraron ayer en el país ibérico, nuevas agrupaciones políticas de reciente formación golpearon a los partidos tradicionales y amenazan el status quo político de casi cuatro décadas en España, en el cual el PP y el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) han gobernado relativamente sin desafíos. 

La libertad de expresión tuvo un día negro en España la tarde de ayer. La Operación Araña, a cargo de la Guardia Civil española, realizó 19 detenciones. 

El operativo entró en su tercera fase haciendo arrestos en las comunidades de Castilla y León, Cataluña, Galicia, Madrid, País Vasco y Valencia bajo la consigna de que quienes fueron privados de su libertad daban rienda suelta al “enaltecimiento del terrorismo”.

El vocalista del grupo de rapcore Def Con Dos, César Strawberry, estuvo entre los implicados que fueron resguardados en la capital madrileña. 

El instituto proclama su apoyo a ‘la defensa del Estado de Derecho, la democracia liberal, los derechos humanos, la economía de mercado y los valores atlánticos’. Para constituir el consejo de su Instituto Atlántico de Gobierno, el expresidente español José María Aznar se apoyó de tres distinguidos mexicanos, entre otros líderes políticos, académicos y empresariales de Iberoamérica.