En la que podría ser la protesta más grande en la lucha por un aumento del salario mínimo, los trabajadores de restaurantes de comida rápida en unas 100 ciudades de EU planean realizar paro el jueves.

Las acciones tienen como fin acentuar una campaña que comenzó hace un año para llamar la atención sobre la dificultad de vivir con el salario mínimo de 7.25 dólares por hora, o unos 15 mil dólares al año para un trabajador de jornada completa.

En el reporte mensual “Encuesta sobre las Expectativas de los Especialistas en Economía del Sector Privado”, elaborado por el Banco de México (Banxico), se destaca que, por primera vez desde abril del presente año, las expectativas de crecimiento de la economía mexicana para el 2013 aumentaron del 1.24 al 1.28 por ciento, respecto a lo reportado el mes de octubre. Sin embargo, aún con dicho resultado, las expectativas a largo plazo siguen yendo en picada.

Las personas más ricas del planeta no dejan de hacer crecer sus fortunas. La lista de los 100 individuos con más dinero, actualizada diariamente por Bloomberg, reporta que en el último año sus fortunas colectivas crecieron alrededor de 200 mil millones de dólares, lo que da un total de de 2.1 billones de dólares.

En la lista destacan dos mexicanos. Por un lado se encuentra Carlos Slim, quien se mantiene como el segundo hombre más rico del mundo con un valor neto de 72.9 mil millones de dólares, solo superado por el magnate de la tecnología Bill Gates. 

México sigue dependiendo comercialmente de Estados Unidos, a pesar de tener firmados 12 Tratados de Libre Comercio con 44 países, 28 Acuerdos de Promoción y Protección Recíproca de las Inversiones (APPRIs) y 9 acuerdos comerciales, que representan el 60 por ciento del PIB mundial.

Cuando los países emergentes apenas comenzaban a consolidar una recuperación económica después de la crisis financiera del 2008, una nueva sombra los acecha.

Países como México, Brasil y China consiguieron revertir los efectos negativos de la crisis debido en gran parte al crecimiento acelerado de deudas en el sector privado. Tanto consumidores como empresas se lanzaron a obtener préstamos que hoy en día representan un peligro ante su posible incobrabilidad.