Fue inesperado. A poco de asumir como presidente de Guatemala, Otto Pérez Molina captó la atención internacional al declarar que propondría la despenalización del tráfico de drogas en la región.
Algunas semanas después, el vicepresidente estadounidense Joe Biden visitó a presidentes latinoamericanos, hubo más reuniones entre mandatarios regionales y discusiones en la Cumbre de las Américas.
Y casi al cerrar el año, electores en Estados Unidos votaron a favor de legalizar la mariguana para uso recreativo en los estados de Colorado y Washington.
Indigo Staff