Hace un año el Gobierno de la CDMX destinó 50 millones de pesos para cerrar los carriles y peatonalizar el Zócalo. Foto: Especial

Zócalo peatonal cumple un año: ¿cuál es su nueva cara?

La Plaza de la Constitución ahora es un lugar amable para la convivencia de las familias y los trabajadores del primer cuadro de la capital

El 8 de enero de este 2025 se cumplió un año desde que se peatonalizó el primer cuadro del Centro Histórico de la Ciudad de México (CDMX) y, con esto, se atendió una demanda social de “hacer más amable” la plaza pública más importante del país.

Dicha peatonalización ha traído consigo una mayor cantidad de visitantes al Zócalo y mejoró la convivencia de las personas que a diario trabajan en él.

Una muestra de que las personas han abrazado al Zócalo peatonal, es que la Verbena Navideña que instaló el Gobierno de la Ciudad de México acumuló, solo del 23 al 31 de diciembre de 2024, un total de 14 millones de visitantes nacionales y extranjeros, lo que, según las autoridades locales, rompió el récord de años anteriores.

El Zócalo es la principal plaza pública del país; en sus alrededores se encuentra el Palacio Nacional donde está la sede del Poder Ejecutivo Federal, la sede del Poder Judicial Federal se ubica a un lado, así como el Gobierno de la Ciudad de México que reside en el Palacio de Ayuntamiento y el Edificio Cúspide.

Desde la percepción de menos ruido por las mañanas, hasta familias completas caminando y personas paseando con sus perros son las escenas que se aprecian en donde, apenas hace 365 días, había cuatro carriles de tránsito vehicular.

Fue el 8 de enero de 2024, cuando Martí Batres, entonces jefe de Gobierno de la CDMX, dio a conocer la peatonalización total de la Plaza del Zócalo y del circuito de la Constitución como una acción para priorizar a los peatones y promover el uso de transporte sustentable no motorizado.

Capitalinos encuentran mayor libertad en el Zócalo peatonal Actualmente, el ruido de los autos ya se fue, el paso de peatones desde los extremos de las calles Pino Suárez o 16 de septiembre parece no tener fin porque ya no hay automóviles que limiten el tránsito de las personas.

Bicicletas y adultos de la tercera edad se cruzan caminando bajo el tenue rayo del sol de una mañana de enero. “Churros, churros”, ahora se escucha a un vendedor por la entrada de Metro Zócalo, cuando antes, las manifestaciones o los cláxones de los automóviles, acaparaban el sonido.

“Puedes caminar un poco más libre, porque antes había carros que se detenían o iban a baja velocidad en la explanada del Zócalo, y los transeúntes o visitantes teníamos que estar fijándonos, porque la mayoría de los conductores eran turistas que se tomaban fotografías o simplemente iban viendo el panorama”, afirmó Catalina Vázquez a Reporte Índigo, mujer que trabaja desde hace más de 10 años en el Centro Histórico, y camina desde el Metro Zócalo hasta su oficina de manera cotidiana.

Incluso, agregó, que es más agradable pasear con la familia o ir de compras en comparación con hace un año. No obstante, aclaró, ahora que ya es peatonal la plancha del Zócalo, debería extenderse más esta iniciativa.

“Por lo menos una cuadra más que se haga peatonal, porque sólo es la explanada y en la calle de Venustiano Carranza ya pasan los carros, y el Zócalo siempre está lleno por los que trabajan aquí, los que vienen a surtir para sus negocios y los manifestantes, entonces estaría mejor que se extendiera hacia allá”, sostuvo.

Mercedes es una adulta mayor que vende dulces en la calle de Madero y también comenta que la convivencia ha mejorado con el Zócalo peatonal.

“Ya no se hacen los amontonaderos de gente que quería cruzar de Madero hacia el Zócalo y las personas se ven caminando más tranquilas sin tanto coche”, explicó.

¿Cómo fue que el Zócalo se convirtió en peatonal?

Al presentar el decreto de peatonalización del Centro Histórico, el entonces jefe de Gobierno, Martí Batres, informó que el proyecto contó con una inversión de 50 millones de pesos y se realizó con el fin de garantizar el acceso libre y seguro de la ciudadanía al espacio público más emblemático del país.

“Hoy podemos decir la gente, las familias, los vecinos, los ciudadanos, los visitantes, los capitalinos, los mexicanos hemos conquistado un espacio público más, no cualquiera, el principal espacio público de México”, señaló Batres Guadarrama.

También detalló que desde esa fecha, se determinó como peatonal la calle Plaza de la Constitución con cuatro objetivos; el primero, brindar accesibilidad peatonal permanente y sin obstáculos a la plaza; segundo, permitir la apreciación de la configuración urbana del lugar.

En tercer lugar, Batres señaló el objetivo de fomentar y promover la movilidad sustentable, así como priorizar al peatón sobre los vehículos motorizados; y cuarto, rescatar, dignificar y revitalizar el uso del espacio público para la sana convivencia y el disfrute de las actividades que en él se realicen.

También se estableció el cierre de la circulación a vehículos motorizados en las calles 5 de Febrero, 20 de Noviembre y José María Pino Suárez, únicamente en los tramos que comprenden desde la calle Plaza de la Constitución a Venustiano Carranza.

Con lo anterior, el Zócalo peatonal se unió a Francisco I. Madero, como un andador peatonal, y a la calle 16 de septiembre, que es semipeatonal.

Es importante mencionar que el tránsito de vehículos se limitó solo a los que prestan servicios públicos y que acudan a las oficinas de Palacio Nacional, la Suprema Corte de Justicia de la Nación, el Antiguo Palacio del Ayuntamiento y la Catedral Metropolitana, en tanto cuenten con la autorización expedida por las autoridades competentes.