En pie y con buen semblante, Miguel Ángel Mancera abandonó el Hospital ABC, a poco más de una semana de haber sido operado del corazón.
En un principio el jefe de gobierno del Distrito Federal se sometió a intervención por la presencia de arritmia, pero una complicación en la cirugía prolongó su permanencia y hasta el sábado fue dado de alta.
Sin embargo, abandonó el hospital ayer por la tarde pues, según informó su secretario particular Luis Serna, prefirió quedarse en el nosocomio para tener privacidad y tranquilidad.
“El alta médica ya está, pero él prefirió estar el fin de semana aquí para su privacidad y estar tranquilo con su familia”, dijo el sábado.
Horas después del anuncio, Mancera salió del hospital por su propio pie, reiterando que su estado de salud es bueno.
“Estoy bien”, se escuchó decir al mandatario, quien levantó su pulgar en señal de recuperación.
Asuntos pendientes
El jefe capitalino había estado administrando y dando instrucciones a su equipo de trabajo desde su habitación en el ABC.
El pasado miércoles el gabinete de Seguridad del Distrito Federal se reunió con Mancera en el hospital, luego de la captura del exalcalde de Iguala, José Luis Abarca, y su esposa en una casa ubicada en la delegación Iztapalapa.
Según reportó El Universal, antes de subirse a una camioneta que lo llevaría a su casa en la delegación Benito Juárez, Mancera dijo que esta semana se reincorporará a sus actividades habituales.