El barrio de San Gregorio en Xochimilco es uno de los lugares que sufrieron los mayores daños en la Ciudad de México. Al menos unas 50 casas quedaron destruidas por el sismo de 7.1 grados registrado el martes.
Las personas de San Gregorio se sienten olvidadas, dicen que toda la ayuda se ha concentrado en el centro de la capital y, del delegado Avelino Méndez, no han recibido apoyo.
En esta comunidad hacen falta herramientas, medicinas y víveres; los servicios básicos como agua y luz tampoco han sido restablecidos, por lo que las familias no pueden cocinar sus alimentos.
En San Gregorio también se tienen reportados dos casos de hepatitis, por lo que es vitsal enviar medicamento para tratar este padecimiento. Los pobladores aseguran que aunque Avelino Méndez informó en un comunicado que los centros de acopio están llenos, la ayuda no ha llegado a dos días del sismo.
Entre los callejones de este barrio se observa la tragedia, hasta el momento, los habitantes han tenido que realizar la remoción de escombros piedra por piedra. Lo estrecho de sus calles dificulta el acceso de maquinaria para levantar los bloques de concreto con tabique.
En el lugar ya se encuentran elementos del Ejército mexicano, de la Policía Federal y personal de emergencias del ERUM. A los rescatistas voluntarios que entran a la zona solo se les permite ingresar si traen casco.
Las pocas vías de comunicación hacia San Gregorio han complicado la llegada de ayuda. Muchos vehículos se encuentran en el congestionamiento vial de las principales avenidas, como México Poniente. Además de que algunas de las calles presentan grietas y se han convertido de un carril que sirve de ida y vuelta.
Fotos: Gerardo Hernández y Ernesto Santillán
Urgen plantas de luz para seguir con trabajos
En San Gregorio las tareas de rescate se complican por la falta de luz en la comunidad. Habitantes afirman que necesitan plantas de luz de 5 mil watts para poder continuar con los trabajos de remoción de escombros y la búsqueda de personas con vida.
La situación se complica aún más, debido a que en algunas zonas hay fugas de gas, por lo que existe el riesgo , al maniobrar, de que se presenten explosiones o incendios.
