En medio de las investigaciones tras la detención de Marco, el joven de 17 años que estuvo desaparecido cinco días, tras presuntamente ser golpeado por policías, autoridades de la Ciudad de México informaron que no podrán ser utilizados los videos de la patrulla en la que se trasladó al muchacho.
De acuerdo con información de la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México, las cámaras de la patrulla a la que subieron al adolescente, no funcionaban.
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“Las video cámaras instaladas en la patrulla relacionada con los hechos, se encontraban averiadas desde el 8 de noviembre de 2017”, precisó la dependencia capitalina en un comunicado.
Es preciso señalar que lo que haya ocurrido en la patrulla aquel día es importante, ya que, de acuerdo a las denuncias, Marco fue golpeado, subido al vehículo, y abandonado a su suerte calles adelante, sin haber sido presentado ante el Ministerio Público.
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La Procuraduría señaló que el último video captado por el sistema de vigilancia de la patrulla en cuestión es del 8 de noviembre de 2017, día en que se habrían descompuesto las cámaras.
Mientras tanto, organizaciones de la sociedad civil y la Universidad Nacional Autónoma de México, de la que Marco es alumno, siguen solicitando que se deslinden responsabilidades, ya que distintas voces acusan detención arbitraria, violencia policial, e incluso desaparición forzada.
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