Los videojuegos violentos modifican la conducta de quienes los usan

Tras el atentado en el Colegio Americano del Noreste en Monterrey, en el que un niño de 15 años disparó a su maestra y compañeros de clase, se señaló a los videojuegos como una posible causa de violencia entre niños y jóvenes.

Un informe de la Asociación Estadounidense de Psicología (APA) indica que existe relación entre esta forma de “entretenimiento” y el comportamiento del menor.

Tras el atentado en el Colegio Americano del Noreste en Monterrey, en el que un niño de 15 años disparó a su maestra y compañeros de clase, se señaló a los videojuegos como una posible causa de violencia entre niños y jóvenes.

Un informe de la Asociación Estadounidense de Psicología (APA) indica que existe relación entre esta forma de “entretenimiento” y el comportamiento del menor.

“La investigación demuestra una relación consistente entre el uso de videojuegos violentos y un incremento en el comportamiento agresivo… y un decrecimiento en la empatía y la sensibilidad a la agresión”, indica el estudio.

APA considera que el comportamiento agresivo en los niños se da por que los pensamientos violentos crecen al grado que la más pequeña provocación es interpretada como hostil.

La adrenalina en el individuo crece y el pulso se acelera por ende hay comportamientos de dominio por parte del menor y éste querrá imitar lo visto en el imagen del juego.

Al jugarlos con frecuencia, el sujeto creerá que la solución de las cosas es a base de la violencia y agresión. 

Ante los actos de violencia que los menores a menudo ven, APA recomienda que el padre de familia:

*Piense en voz alta y diga algo como ”No voy a ver este programa: es demasiado violento” o “No me gusta ver cómo la gente se hace daño, incluso cuando es de mentira”, y luego cambia el canal a un programa no violento.

*Juegue, lea libros, dibuje, arme puzzles, cante o escuche música con sus hijos para mostrarles que hay alternativas divertidas que la televisión y los videojuegos.

*Enséñeles a responder con palabras firmes pero manteniendo la calma cuando otros insultan, amenazan o golpean a otra persona.

*Ayúdelos a entender que se necesita más coraje y liderazgo para oponerse a la violencia que para secundarla.

*Ayude a sus hijos a aceptar y llevarse bien con otras personas de diversas razas y origen étnico.

*Asegúrese de que entiendan que usar palabras para comenzar o alentar la violencia, o aceptar silenciosamente una conducta violenta, es dañino.

*Advierta a sus hijos que las amenazas y los actos de intimidación pueden derivar en violencia.

 

 

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