A través de la red social de Facebook, comenzó a difundirse un video donde un hombre se identifica como José Noriel Portillo Gil, apodado “El Chueco”, la persona señalada por las autoridades como presunta responsable del asesinado de los sacerdotes jesuitas en la comunidad de Cerocahui, Chihuahua, y quien ofrece otra versión sobre los hechos sucedidos el pasado 20 de junio.
Personal de la Fiscalía General del Estado (FGE) de Chihuahua informó que en conjunto con el Ejército Mexicano analizan el video para establecer su procedencia e indica que esas declaraciones carecen de veracidad y sustento legal”.
En el video, un hombre que cubre su rostro con un pasamontañas blanco y utiliza una cachucha, asegura ser Portillo Gil y afirma que al momento que él ingresó a la iglesia de la comunidad de Cerocahui vio a un hombre que portaba un arma de fuego y a personas tiradas en el suelo a quienes reviso y ya no tenían signos vitales.
Además, el hombre del video dice que el responsable de los crímenes es otro hombre quien fue “apapachado” por un sacerdote y deslinda de responsabilidad a Portillo Gil.
#Chihuahua 🚨👇🏻 Analizan supuesto video de “El Chueco”https://t.co/t5E5Qdamtb pic.twitter.com/Wf7rHZPi8c
— LaparaDoJa (@LaparaDoJaChih) August 25, 2022
“Quieren saber la verdad, cómo está la cosa. Pregúntenle al cura, investiguen al cura. Dice el gobierno que anda investigando, que inteligencia y todo ese rollo. Por qué no comienzan a investigar al cura, cómo estuvo toda la cosa, porque nomás se van ahí… a ver, por qué el cura me echó toda la bronca a mí, si él sabe bien en realidad, cómo estuvieron las cosas ahí. De antemano esto lo hago para que la gente sepa en realidad quién es el culpable y en realidad quien tiene que ver en todo este rollo”, se escucha en una parte de la grabación.
Fiscalía lamenta video atribuido a “El Chueco”
La Fiscalía lamentó la reproducción del contenido y señaló que el objetivo es confundir a la ciudadanía y desestimar los esfuerzos que los tres órdenes de gobierno realizan por brindar seguridad a la sociedad chihuahuense.
El 20 de junio de este año fueron asesinados los sacerdotes jesuitas, Javier Campos Morales y Joaquín César Mora así como el guía de turistas Pedro Eliodoro y uno de los hermanos Berrelleza Rábago.
Horas después de atentar contra la vivienda de los hermanos Berrelleza Rábago, presuntamente “El Chueco” tuvo contacto con el guía de turistas Pedro Eliodoro y lo secuestró.
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Más tarde esta última víctima pudo escapar y llegó policontundida a la capilla de los sacerdotes jesuitas, Javier Campos Morales y Joaquín César Mora Salazar, quienes trataron de brindarle ayuda, pero fueron asesinados junto con el guía.
Los cadáveres de los religiosos y del guía fueron aventados a la caja de una camioneta pick up por “El Chueco” y sustraídos.
El 22 de junio, la gobernadora de Chihuahua, María Eugenia Campos Galván, anunció que ambos cuerpos habían sido localizados en una zona conocida como Pitorreal, ubicada entre San Rafael y el poblado de Creel, en la Sierra Tarahumara.
A la fecha sigue prófugo Portillo Gil, “El Chueco”.
