Ven dificultad crediticia y regios crean un banco

Cuando la banca nacional, acaparada por capitales transnacionales, limita sus créditos a la empresa privada, un grupo de regiomontanos crea una institución financiera que puede llenar ese vacío a las Pequeñas y medianas empresas (Pymes).

Bancrea, proyecto respaldado por 10 familias con experiencia en los negocios, arrancó operaciones el 6 de diciembre con una cartera de crédito autorizada de mil millones de pesos para el 2014.

Este banco se enfoca en respaldar financiaremente a las Pymes y nació con una primera sucursal ubicada en Calzada del Valle, en San Pedro.

Su plan de negocios abarca la apertura de dos sucursales en enero próximo y tres más en el transcurso de 2014, y ha puesto su mirada en el corredor del Bajío, una dinámica área donde hay oportunidades de expansión.

En las oficinas corporativas del banco, ubicadas en Río de la Plata, el director general de Bancrea, Adrián Lozano Lozano, comparte las ambiciones del proyecto que hasta el momento ha captado alrededor de 65 clientes.

El banquero cuenta que el concepto lo inició hace dos años y, paulatinamente, se han incorporado los inversionistas, quienes tenían el interés de abrir una institución financiera bancaria para apoyar a las empresas.

“Al ser empresarios veían que sí había dificultad para obtener créditos o servicios en alguna medida. Y lo que hicimos fue juntar el hambre con las ganas de comer”, dice.

“Participaron desde un inicio en la constitución del proyecto. Y en esto tenemos más o menos un año y medio trabajando junto con ellos”. 

Gran parte de los empresarios que se incorporaron forman parte del Consejo de Administración, y tienen no sólo experiencia bancaria, sino también en la industria alimenticia e inmobiliaria, entre otras.

El director hizo mancuerna con Ernesto López Clariond y Federico Clariond Domene, dos de los principales inversionistas que ahora son presidente y vicepresidente de Bancrea, respectivamente.

Entre otros destacados miembros de la misma familia que se integraron son Benjamín Clariond y María Clariond.

Además, están Hugo y Alejandro Martínez, fundadores de Lucas, y su primo Hernán Martínez, de Grupo Martel; los abogados Roger Morales Banuet y Luis Lozano Ramírez, y Gilberto Torres Sánchez.

Lozano Lozano, quien tiene 20 años de experiencia en el sector, explica que los productos que ofrecen a las Pymes están fondeados por capital propio, accionistas y fuentes institucionales como Nafin, Bancomext, Fira y Sociedad Hipotecaria Federal, que constituyen la banca de desarrollo.

Pero asegura que no otorgarán créditos hipotecarios, automotrices o en tarjetas, porque es un mercado que ya está acaparado por grandes grupos.

Hasta la fecha, cuentan con alrededor de 65 clientes en Nuevo León, en diferentes segmentos de la industria, como la vivienda, el software, la manufactura y el comercio.

El otro nicho de mercado constituye la captación en zonas con ingresos medios y altos.

“Es regresar a cómo era la banca antes: de conocer al cliente, de atenderlo, entenderlo y ver las necesidades”, explica.

“Nuestro objetivo primordial es la intermediación entre la captación de esta gente, de nuestros clientes, personas físicas, y colocar bien esos recursos, bien garantizados, pero apoyando siempre el segmento empresarial aquí en la zona conurbada de Monterrey”.

Otra ventaja, dice el banquero, es que la institución atrajo a ejecutivos, gerentes y subdirectores de otros bancos que conocen el mercado, una situación que generó que fueran los mismos clientes los que empezaran a buscar a esta institución.

El capital social con el que inició el banco fue de 480 millones de pesos y para mediados de enero abrirá dos sucursal más: una en la avenida Juárez, en Guadalupe, y otra en Santa Catarina, en la carretera a Saltillo.

Para el siguiente año, asegura Lozano, planean colocar otra en San Nicolás, una en Apodaca y, posiblemente, una tercera en el Municipio de Monterrey.

Por lo pronto, el banco inició operaciones con 67 personas y las líneas autorizadas de crédito empezaron a operar esta semana.

“Es de tener un banco que se caracterice por el servicio al cliente, que denominamos internamente ‘banca cálida’, es decir, que seamos cálidos en el trato con el cliente, cercanos”.

De la cartera de crédito autorizada, Lozano pronostica que se colocarán el próximo año entre 500 y 600 millones de pesos.

El director general de Bancrea asegura que después de dos o tres años, este nuevo banco planeará su expansión a la Ciudad de México y el Estado de México y, si las condiciones son favorables, de manera simultánea en el Bajío, en entidades como San Luis Potosí, Puebla y Querétaro.