Vegetación del río Santa Catarina salva de daños severos a avenidas Morones Prieto y Constitución

La vegetación surgida en el río Santa Catarina a partir del paso del huracán Alex en 2010, salvó de daños severos a las avenidas Constitución y Morones Prieto al contener y reducir la velocidad del gran caudal de agua durante la recientemente ocurrida tormenta tropical Alberto.

Sin embargo, de acuerdo con el biólogo Antonio Hernández, la labor de la flora para evitar afectaciones en la vialidad provocó que el 85 por ciento de ésta se perdiera con estas fuertes lluvias.

A diferencia de la opinión del gobernador Samuel García y de su secretario de Movilidad, Hernán Villarreal, respecto a que el agua se salió del cauce y dañó los carriles exprés del llamado Par Vial a causa de la presencia de flora, Hernández comentó que en los sitios arbolados del río no se presentaron daños, y como muestra señaló el área del río desde el Puente Atirantado y hasta la avenida Gonzalitos, donde abunda la vegetación y no existe un solo daño a avenidas, a pesar de que Morones Prieto a está a una altura de unos dos metros por encima del lecho.

Agregó que las observaciones preliminares indican que las pérdidas en la mayor parte de las afectaciones a la infraestructura vial sucedieron del lado de la avenida Constitución, y se debe a que esa zona carece de más vegetación comparado al área cercana a la avenida Morones Prieto.

“Varias zonas de las avenidas Constitución y Morones Prieto que fueron destruidas, hay una coincidencia con la falta de vegetación, y en el extremo, en las zonas del Río Santa Catarina que sí tienen presencia de árboles, ahí no tenemos identificada hasta ahora como que haya una pérdida de infraestructura.

“Ahí estaríamos hablando de un efecto benéfico de la vegetación, que fundamentalmente viene de dos aspectos, una es que hay una reducción significativa de la velocidad, y la segunda, la estructura de las raíces de los árboles, dan como solidez y fortaleza al suelo, y de alguna manera protegen a la infraestructura vial que está inmediata al Río Santa Catarina”, dijo el especialista.

El biólogo expresó que participó en algunas reuniones de trabajo con especialistas, donde mencionaron que la velocidad del agua habría alcanzado hasta los cinco metros por segundo en la zona central del río y que de no haber arborización la velocidad hubiera sido mucho mayor.

Hernández mencionó que pasaron alrededor de 14 meses desde que el Gobierno del estado realizó algunos desmontes en el río Santa Catarina para prevenir inundaciones, y sin embargo, en ese periodo la vegetación se recuperó totalmente.

“El papel de la vegetación de manera general es fundamental en la estructura de los ríos urbanos y en las zonas silvestres. No podemos hablar de un efecto benéfico en los desmontes, porque los desmontes ya no estaban vigentes.

“Esto es una realidad: la presencia o ausencia de la vegetación sí marca una diferencia en la protección de la infraestructura vial, y hay que entender cómo se da la protección; la protección se da bajo varias miradas, pero una es que puede haber una reducción sensible de la velocidad, y la otra es cómo le da soporte a la superficie del suelo donde está inmediata la infraestructura, y esto previene aspectos como lo que es más común, la socavación de las avenidas de los cimientos, justo por la parte del agua”, explicó.

Reiteró que la protección de la vegetación se validó en varios puntos del cauce, aunado a la protección que también brindó la cortina rompepicos al interior de la Sierra Madre en Santa Catarina, que contuvo el exceso de agua y dosificó su paso.

La versión del Gobierno

Luego de los daños millonarios que provocó la tormenta Alberto en las avenidas Constitución, en su extensión al boulevard Miguel de la Madrid, y en la avenida Morones Prieto, a su paso por municipios de la Zona Metropolitana, el gobernador Samuel García y Hernán Villarreal, sin argumentos, señalaron que la vegetación en el río Santa Catarina provocó que el agua se desviara y dañara los carriles exprés, que prácticamente están al nivel del cauce en los sitios donde hubo esas afectaciones.

“¿Por qué se afectó Morones y construcción bajo puentes? Pues porque había bastantes árboles en el río. ¿Y qué hizo el agua? Se fue por los lados”, dijo la semana pasada el mandatario estatal en rueda de prensa.

Su versión fue respaldada por Hernán Villarreal, secretario de Movilidad y Planeación Urbana del estado.

Sin embargo, versiones de activistas refieren que la realidad es que el Gobierno de Nuevo León ya tiene proyectos de privatización del río, e incluso ese proceso inició desde hace un año con la construcción sobre el cauce de una autopista privada de cuota.

Destaca que en julio de 2023 el Gobierno del Estado removió 23 kilómetros de vegetación sobre el cauce del río, a pesar de ser una zona federal.

Fauna en riesgo

De continuar el Gobierno del Estado con su intención de desmontar el río Santa Catarina, decenas de especies de animales de tierra, aire y agua, serán afectados.

Entre ellos están diferentes especies de garzas, de patos, castores y tortugas, que se quedarían sin hogar.