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El presidente Enrique Peña Nieto inició su segundo año de gobierno con una línea de acercamiento social.
El domingo entregó el Premio Nacional del Deporte. Ayer, la primer gira del segundo año de gobierno fue a la sierra de Durango.
Luego de inaugurar el último tramo de la carretera Mezquital-Huazamota, el mandatario dijo que se impulsarán más programas sociales y se reforzarán los que prevalecen para borrar los “rostros de la miseria y la marginación”.
Acompañado, de los titulares de Desarrollo Social, Rosario Robles; Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza y el gobernador de la entidad, el priista Jorge Herrera Caldera, el jefe del Ejecutivo tomó protesta a los comités ciudadanos de la Cruzada Nacional Contra el Hambre y destacó la importancia de población indígena “como raíz y fuente de diversidad en el país”.
El presidente dijo que los 197 kilómetros de carretera que atraviesan la Sierra Madre Occidental beneficiarán a las comunidades de la zona al comunicarlas con la capital de una manera más eficiente.
Con ello, dijo, que se fomentará el progreso y el desarrollo económico, y se ahorrarán 11 horas de recorrido para llegar del Mezquital a Tepic, Nayarit.
La obra tuvo una inversión de más de mil millones de pesos y permitió generar 3mil empleos directos.
El presidente destacó los logros de los programas Oportunidades, Huertos Familiares, Seguro de Vida a Jefas de Familia, y el “65 y más”, y aseguró que se buscará dar las herramientas a las personas con mayor rezago para que puedan incorporarse a las actividades productivas.
“Queremos lograr que la condición de pobreza y rezago se pueda cambiar”, dijo el mandatario luego de entregar apoyos productivos y sociales.
Peña Nieto destacó que con estos apoyos la zona se podrá incorporar a las actividades productivas.
Una ‘limpia’ presidencial
POR: CAROLINA HERNÁNDEZ
El primer año de gobierno de Enrique Peña Nieto no fue miel sobre hojuelas. En el cumpleaños de su mandato hubo manifestaciones, críticas y evaluaciones poco positivas.
Quizá por eso, el presidente decidió hacer algo al respecto. Algo para lograr que su segundo año al frente del país sea mejor. Para que nadie le diga que sus discursos son pura retórica.
Así, ataviado con camisa de manta, sombrero de paja y morral de lado, el jefe del Ejecutivo se hizo una “limpia” para alejar las “malas vibras” y traer la buena suerte.
El ritual se hizo durante su visita al valle del Mezquital en Durango donde habitan las etnias tepehuanos, huicholes, coras y mexicaneros.
Ahí, luego de inaugurar la carretera que conectará la zona, los anfitriones realizaron una ceremonia de bienvenida para el mandatario y los secretarios de Desarrollo Social y de Comunicaciones y Transportes.
“Nos hicieron una limpia para que tengamos un mejor año y estoy seguro que así habrá de ser”, indicó optimista el presidente.
Ya en junio de este año, Peña Nieto había recibido otra “limpia” durante el recorrido que hizo con el presidente de China, Xi Jinping, a Chichen Itzá.
En aquella ocasión a los mandatarios se les realizó el ritual con hierbas aromáticas y agua pura.
El sacerdote frotó las hierbas sobre la cabeza y los hombros de los presidentes, después de pedir autorización a los vientos…tal vez algo faltó.
