Uriel Antuna llegó a la ciudad de Monterrey como nuevo jugador del Club Tigres y en su aterrizaje brindó sus primeras declaraciones, que no caen en gracia para los aficionados de Cruz Azul, equipo de donde salió por temas personales y familiares.
Tras su arribo al Aeropuerto Internacional de Monterrey, salió con una bufanda con la leyenda “Somos incomparables“, acto que la directiva acostumbra realizar con cada jugador nuevo que llega al equipo para ser presentado ante la prensa de Nuevo León.
En sus primeras palabras como felino, habló sobre la decisión de dejar a la “máquina cementera” y dar el sí al equipo de Tigres, así su pensamiento sobre la afición auriazul.
“Contento por este nuevo reto en mi vida, con excelentes jugadores, excelentes personas, con varios de ellos he platicado anteriormente en algunas ocasiones y nada, contento de estar acá”.
¿Por qué venir a Tigres?
“Es una institución muy grande, por lo grande que es la afición, me entusiasma mucho la afición, los incomparables que la verdad que creo es la mejor afición de México y las veces que me tocó venir como rival la verdad que se ponía la piel chinita cuando venía a jugar acá, y bueno ahora me toca estar acá y espero entregar lo mismo que ellos me van a entregar”, dijo.
En un comunicado que publicó en sus redes sociales, previo a realizar el viaje de Ciudad de México a la Sultana del Norte, explicó que uno de los motivos que orilló su salida de Cruz Azul fue por la cercanía que tendrá con su familia que vive en Durango.
El centrocampista, actual campeón de goleo y seleccionado nacional acudió a las pruebas físicas y médicas para posteriormente ser presentado de manera oficial con sus nuevos compañeros y ponerse a disposición de las indicaciones del director técnico Veljko Paunovic, previo a la Jornada 6 donde Tigres enfrentará a Pumas.