México y sobretodo el estado de Puebla está repleto de héroes anónimos que luchan por los demás y tratan de promover un cambio, con el objetivo de apoyar a los que más lo necesitan. Como sociedad, es importante no ser ajeno a los problemas y demostrar que la unión hace la fuerza.
Bajo el lema: “Hay que unirse, no para estar juntos, sino para hacer algo juntos ¿Te apuntas?”, la organización sin fines de lucro, Compartiendo Alegría, se encarga de realizar diversas labores altruistas en las más de 100 comunidades que conforman el municipio de Tlatlauquitepec, Puebla.
La idea de apoyar a las personas más desprotegidas nació solo de observar las distintas condiciones de vida que la gente enfrenta día tras día. Es por ello que, solo con 17 años, Jahdaí Rodríguez Polo decidió comenzar a cambiar un poco el panorama.
“Aquí en Tlatlauquitepec hay mucha necesidad; todo comenzó al observar a la población que tenemos a nuestro alrededor. Realmente no era el objetivo tener una organización como tal, simplemente fue querer ayudar y comenzar a hacerlo.
“Poco a poco se fueron sumando otras personas, adultas, porque en ese entonces yo era menor de edad. Ahora, ya estamos por cumplir cinco años con la asociación. La gente comenzó a tener esa iniciativa y me dijeron: ‘tú nos diriges’; la verdad es que yo era nueva en eso, pero con el apoyo de todos comenzamos a trabajar”, explicó Jahdaí Rodríguez, fundadora de Compartiendo Alegría.
De inmediato se buscó la forma para poder ayudar y la opción fue entablar relación con el área de Protección Civil de la entidad, pues tiene relación cercana con los inspectores y representantes de las diversas comunidades, y así tener un mejor panorama de las comunidades que estaban enfrentando mayores problemas.
“Ellos me apoyan y me proporcionan las listas de cuántas madres solteras hay, el número de personas discapacitadas, niños y niñas vulnerables, etcétera. Con base en esos datos, organizo la entrega de despensas, cobijas, juguetes, lo que se le da a cada persona.
“A lo largo del año estamos activos. Visitamos una o dos veces el hospital de Tochimpa y llevamos comida. Para diciembre, hacemos las actividades más grandes del año, que es cuando se visitan las comunidades más vulnerables. Todo con base en un análisis para saber qué comunidades no se han visitado y que realmente necesitan en el apoyo, agregó Rodríguez Polo a Reporte Índigo.
Un ejemplo de lo que realizan es que hace tiempo se movilizaron para ayudar a diversas personas en la comunidad de Zautla, pues hubo un incendio donde varias familias perdieron sus casas. Así que la organización se dio a la tarea de juntar víveres y llevarlos.
“Nosotros asistimos a los municipios a los que nos hacen la invitación o recibimos reportes. Primero, hacemos visitas previas para ver las necesidades y nos movemos con base en eso.
“La verdad es que ayudar es una sensación muy bonita, es algo que te llena en todos los sentidos. Es una gran satisfacción poder hacer algo por alguien que tú no conoces y sobre todo el como ellos te reciben. Hay niños que obviamente no te conocen y te abrazan y te dan las gracias”, agregó Jahdaí Rodríguez sobre las labores que realizan durante el año.
Intercambio y ayuda mutua
La organización se nutre del apoyo colectivo de todos los habitantes de Tlatlauquitepec, que están siempre con la mejor disposición. Asimismo, la asociación promueve una especie de “intercambio”, en el que, a través de diferentes formas, promueven a los comerciantes del lugar.
“Los mismos negocios de la ciudad son los proveedores, nuestros patrocinadores, por decirlo de alguna forma. Como la organización está integrada por voluntarios, no tenemos mucho por ofrecer, pero hay chicos que saben de publicidad, fotografía y otras cosas”, señala.
“De tal manera que, les hacen videos o se les da difusión a sus negocios a través de redes sociales, es una ayuda mutua, tras las aportaciones económicas o en especie de los comerciantes, todo con el propósito de poder ofrecer un panorama mejor a las personas”, agregó la líder de la asociación.
Vale decir que la movilización que realiza Compartiendo Alegría es sin fines de lucro, es por ello que no tienen ningún vínculo con el gobierno de la localidad.
“Hace un tiempo se querían sumar, pero en su momento nos dijeron que querían ser los principales y nosotros (la organización) los secundarios, cuando en realidad así no son las cosas. Ellos querían poner en alto el nombre de su partido y nosotros no nos metemos en esa parte de política, el grupo es altruista. Nos movemos a través del voluntariado”, finalizó Rodríguez Polo.