Este 2 de junio, de nuevo habrá personajes que brillaron en el deporte mexicano en las boletas electorales. Foto: Especial

Una victoria sin gloria; los deportistas y su paso en la ‘cancha política’

Llegan a las elecciones como opciones de cambio, pero una vez en el cargo algunos pasan de los aplausos e idolatría al repudio de quienes les dieron su confianza en las urnas. En estos comicios ¿se repetirá la historia?

Al igual que los actores –y ahora también con los llamados influencers–, los deportistas han sido usados por los partidos políticos como imanes de votos para lograr el triunfo en las elecciones.

Sus logros sobre las canchas de futbol o basquetbol, en la piscina, el tartán o el ring, representan una ventaja sobre sus competidores y, también, sirven como “oxígeno” para ese hartazgo de la sociedad sobre los llamados “políticos de siempre”.

Por ello, es recurrente que actores de este tipo aparezcan en las boletas electorales y en los comicios de este 2 de junio no será la excepción.

Sin embargo, una vez pasado el “frenesí” electoral, ya entrados en funciones, la mayoría de estas personalidades ha tenido un paso intrascendente y algunas, incluso, han terminado con el repudio de aquellos que les dieron su confianza.

El último caso sobresaliente es el de Cuauhtémoc Blanco, gobernador de Morelos con licencia, quien ahora buscará una diputación federal por Morena a través de la representación proporcional.

El “Cuau”, siempre polémico como futbolista, pero ídolo a pesar de todo, comenzó su carrera en el Partido Socialdemócrata de Morelos, por el que contendió para presidente municipal de Cuernavaca en 2015.

Durante su gestión, se le acusó de haberle pedido al partido siete millones de pesos para ser su candidato y en diciembre de 2016 se le inició un proceso de juicio político por no cumplir con el requisito de vivir al menos cinco años en Cuernavaca antes de las elecciones.

Sin embargo, este lo terminó desechando la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) por considerarlo inconstitucional.

Para 2018, contra todo pronóstico, el también “actor” de Televisa, ganó la elección por la gubernatura de Morelos, contendiendo por el Partido Encuentro Social (PES), en conjunto con Morena y PT.

¿Qué ha pasado desde entonces? La gestión del examericanista es la segunda peor calificada entre los gobernadores del país. Al menos, eso es lo que dice un ejercicio de Consulta Mitofsky publicado en septiembre de 2023, en el que se establece que el nivel de aprobación de Blanco es de 38.7 por ciento.

“El caso de Cuauhtémoc es tal vez el mayor ejemplo del deportista profesional que no conoce el mundo político, pero sumamente popular, que triunfa por ello y ya en el desempeño de su trabajo deja muchísimo qué desear”, afirma Sergio Varela Hernández, sociólogo y profesor de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM.

“No creo que alguien sensatamente inteligente pueda pensar que la gestión de este hombre sea digna de imitarse”, enfatiza.

Para mostrar la deficiente gestión del “Temo”, más “botones”. De acuerdo con datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema de Seguridad Pública (SESNSP), Morelos pasó de 783 víctimas de homicidio doloso en 2018 a 1,504 en 2023, es decir, casi el doble.

Además, la entidad se colocó en el primer lugar nacional en secuestro, luego de que la tasa por cada 100 mil habitantes en 2023 pasó a 2.17, casi el doble de lo registrado en 2022 (1.44).

“Algunos deportistas no están capacitados en términos de lo que se requiere para la administración pública. Por ejemplo, un gobernador electo necesita conocimientos mínimos sobre la gestión pública (…) Debes saber de seguridad, finanzas, justicia, leyes”, afirma Varela.

“Ese es el riesgo, que la popularidad se convierta en el signo que identifique a estos personajes antes que el conocimiento y la eventual capacidad para hacer las cosas bien… también pasa lo mismo con la gente de la farándula.

No quiero decir que personas con estudios vayan a ser buenos políticos, administradores o funcionarios. Hay muchos ejemplos que desmienten esto”, asegura el especialista, pero es un hecho que las experiencias de personajes deportivos en la política, al menos en México, no han tenido buenos resultados.

Medallista, legisladora y la funcionaria más cuestionada

El caso de Ana Gabriela Guevara también es de resaltar. La medallista de plata en Atenas 2004 actualmente se desempeña como titular de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), desde la cual se consolidó como la “funcionaria más corrupta” de acuerdo con la plataforma México Elige.

Antes de que llegaran las críticas hacia su gestión en Conade y a protagonizar enfrentamientos públicos con deportistas por falta de apoyo, la sonorense participó en procesos electorales. El primero de ellos fue en 2009 cuando contendió por el PRD, PT y Convergencia para la alcaldía Miguel Hidalgo y perdió.

Posteriormente, en 2012, ya bajo los colores de Morena y PT, compitió para el Senado por el estado de Sonora; sin embargo, volvió a perder, aunque llegó a la Cámara Alta por la vía plurinominal.

En las dos Legislaturas que estuvo (LXII y LXIII), el PT subió al pleno 215 iniciativas, de las cuales, 23 fueron presentadas por la exdeportista y solamente se le aprobaron dos: la Ley General de Protección y Fomento a la Lactancia Materna y una tendiente a fortalecer a los trabajadores del hogar.

Para las elecciones de 2018, Guevara compitió para ser diputada federal y ganó, pero dejó el cargo para tomar la Conade, que hoy es uno de los organismos más señalados en cuestión de opacidad.

“Es una pregunta legítima como ciudadano: si alguien no tiene conocimiento ni experiencia ¿podría gestionar? Es la misma pregunta para presidentes municipales o representantes ante los Congresos. No tienes que saber todo, pero sería mejor tener los conocimientos sobre la técnica legislativa”, asegura Varela.

Para estos comicios, Gustavo Ayón, Paola Espinosa, Paola Longoria, Jorge ‘Travieso’ Arce y Rommel Pacheco buscarán la victoria. ¿Cambiarán la historia?

Disciplina, aspecto a favor

Para el profesor Sergio Varela, profesor de la UNAM y adscrito al Centro de Estudios Antropológicos, el deportista que incurre en la política también tiene ventajas.

“Una de las características que tienen a favor los deportistas podría ser el tema la disciplina, una capacidad de autorregularse en muchos sentidos”, dice.

“Si hablamos de un deportista que compite en equipo, ahí está la capacidad de poder trabajar en grupo y cumplir en una función determinada. Entonces, esas son ciertas virtudes que podrían explotar los deportistas”.

Seis exdeportistas ‘competirán’ este 2 de junio

Como ya es costumbre en los procesos electorales en el país, varios deportistas que han tocado la gloria en sus diversas disciplinas ahora apostarán por contender en la política y buscar un cargo público.

Actualmente, son seis los personajes del deporte que contenderán por diferentes “vacantes”. Desde medallistas olímpicos hasta campeones mundiales de boxeo se pueden observar entre los candidatos a elegir.

Uno de los casos más sonados es el de Rommel Pacheco, quien tuvo una exitosa carrera como clavadista. Desde el trampolín obtuvo medallas de plata y bronce en Campeonatos del Mundo, fue campeón Panamericano y participó en cuatro Juegos Olímpicos.

Tras su retiro no tardó en incursionar en la política. Primero, fue diputado federal por el PAN y para los próximos comicios del 2 de junio compite por la alcaldía de Mérida, pero ahora con Morena.

Paola Espinosa, considerada como una las mejores deportistas en la historia de México también se “clava” en estas elecciones. Participó en tres Juegos Olímpicos y ganó dos medallas (plata y bronce); asimismo, fue campeona mundial y panamericana.

La medallista olímpica Paola Espinosa busca una diputación federal por el
partido blanquiazul. Foto: Especial

La clavadista ha sido una de las críticas más severas de la administración de Ana Gabriela Guevara al frente de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade) y tras su retiro en 2022, optó por incursionar en la política. Se afilió al PAN y ahora es candidata a diputada federal del distrito 8 de Guadalajara.

Paola Longoria es una de las deportistas más reconocidas y galardonadas en su disciplina. La raquetbolista ha conquistado diversas competencias internacionales y ha dominado el ranking mundial de la especialidad. Recientemente, en los Juegos Panamericanos de Santiago 2023 conquistó su medalla de oro número 10 y llegó a 11 preseas en total.

Tras una carrera de éxitos, sorprendió al incursionar en la política y ser “destapada” por el partido Movimiento Ciudadano como candidata a diputada federal por el distrito 5 de Nuevo León.

A su vez, Jorge “Travieso” Arce, campeón mundial mexicano que le dio muchas alegrías al país en el boxeo, ahora tratará de convencer a la gente para que voten por él. Luego de concluir la preparatoria el año pasado y asegurar que le gustaría ser abogado, aspira a una diputación federal por el PAN, en Hermosillo, Sonora.

El “Travieso”, durante un acto de campaña como candidato del PAN. Foto: Especial

Asimismo, Gustavo Ayón, reconocido basquetbolista mexicano que jugó en la NBA y luego brilló en Europa con el Real Madrid, se retiró en 2022 y tras declarar que ya no le apasiona el basquetbol, decidió postularse como candidato a la presidencia municipal de Compostela, Nayarit, por la coalición Morena, PVEM y PT.

Finalmente, uno de los personajes más reconocidos por salir de las canchas para trascender en la política es Cuauhtémoc Blanco. Ya fue alcalde de Cuernavaca, ahora es gobernador de Morelos y aseguró que quiere ser presidente del país. En este 2024 busca una diputación plurinominal como militante de Morena.

También ‘saltan’ entre partidos

Al parecer, la política también se ha convertido en un deporte de constancia para algunos atletas de alto rendimiento que se apartaron de sus respectivas disciplinas.

Una vez que han logrado un puesto de elección popular han optado por buscar la mejor vía posible para seguir con esta carrera, la cual se ha convertido en una de las alternativas favoritas para los exdeportistas.

Recientemente, uno de los representantes del deporte nacional que se ha aferrado a la política es el exclavadista Rommel Pacheco.

Por invitación del gobernador de Yucatán, Mauricio Vila, el deportista mexicano se unió al PAN y compitió por una diputación federal para el periodo 2021-2024. Con esta afiliación política, reconoció a Xóchitl Gálvez como candidata del Frente Amplio por México e incluso le deseó el triunfo en las elecciones federales del próximo 2 de junio.

Rommel Pacheco fue diputado del PAN. Ahora, buscará la alcaldía de Mérida por Morena. Aquí, al lado de Claudia Sheinbaum y Joaquín Díaz Mena. Foto: Especial

No obstante, de un momento a otro cambió de parecer y en octubre de 2023 anunció su llegada a Morena con una fotografía al lado de Claudia Sheinbaum.

“Estoy seguro de que unidos vamos a transformar Mérida y Yucatán haciendo equipo con todas las personas que se quieran sumar a este gran proyecto”, destacó Pacheco.

En redes sociales, el exclavadista fue duramente criticado y ha sido señalado por su falta de ideología. Tras su cambio de partido ahora es el candidato guinda a alcalde de Mérida.

Vale destacar que Rommel no es el único “chapulín” entre los deportistas. Fernando Platas, otro competidor exitoso desde el trampolín también decidió entrar a la política cuando finalizó su etapa en los clavados. El medallista olímpico de plata en Sydney 2000 se unió al PAN y fue candidato a una diputación local en la Ciudad de México, aunque perdió. Posteriormente, se afilió al PRI.

También está Manuel Negrete, quien llegó a ser alcalde de Coyoacán apoyado por la coalición del PRD-PAN-Movimiento Ciudadano. Posteriormente, se cambió a Morena y, luego, contendió a la gubernatura de Guerrero con Fuerza por México.