Una iniciativa de claroscuros

La reforma hacendaria -de aprobarse como está- pondrá un tope de 84 mil pesos a las deducciones personales que hagan para su declaración anual las personas físicas.

La iniciativa establece como límite la cantidad que resulte menor entre dos salarios mínimos al año, o el 10 por ciento del total de ingresos recibidos -incluyendo aquellos ingresos por los que no pagó el Impuesto Sobre la Renta (ISR)-, explica Luis Pérez de Acha.

“Esa reducción amplía la base gravable y la tasa que corresponde al ISR tendrá un impacto mayor que si se hubiera aumentando la tasa”, explica el exasesor de la Secretaría de Energía.

En su opinión, la iniciativa es de claroscuros y evidentemente recaudatoria. 

Hay que analizarla a profundidad, dice, porque algunos de los puntos críticos están en la exención del IVA a colegiaturas, venta, renta y compra de vivienda, y el Código Fiscal.

Las autoridades fiscales reconocieron que era más conveniente derogarlo que continuar angostando a la fuente tributaria del empresariado mexicano.

En cuanto al Impuesto a los Depósitos en Efectivo (IDE), aceptaron que resultaba innecesario para evitar el lavado de dinero en el sector financiero, gracias a los mecanismos preventivos que ya existen.

Pero el tope a las deducciones, aun cuando la Suprema Corte consideró el año pasado que estas erogaciones van dentro de un concepto de mínimo vital, sí provocará un efecto recaudatorio severo en las personas físicas, asegura Pérez de Acha.

Los accionistas

Otro aspecto que es relevante en la reforma, confiesa Luis Pérez de Acha, es el de los accionistas en las sociedades, pues en el Código Fiscal de la Federación están previstas algunas implicaciones en el ISR.

“Cada responsabilidad solidaria de los accionistas es completa sobre el monto total de las acciones, es decir, antes se decía que estaba topada al monto de su aportación y ahora es respecto del porcentaje que tenga en el capital social”, destaca.

Si el capital social está integrado en un 50 por ciento por un accionista, ese responde por el 50 por ciento de un crédito que sea determinado por el SAT.

También a los ejecutivos de empresa se les hace responsables penalmente por incumplimiento.

En la práctica, las denuncias penales se habían construido en función de interpretaciones de las leyes.

Ahora se finca responsabilidad expresa en la Comisión de Delitos Fiscales y se incluye desde la inhabilitación hasta la liquidación de la sociedad.

Pérez de Acha considera que estos mecanismos -que ya se aplican en otros países- son positivos porque en México hay formas de evasión fiscal que no han tenido una reacción del Estado para “morderlos adecuadamente”.

Ahora falta ver, dice, cómo va a operar esta ley en el Sistema de Administración Tributaria y definir en qué sectores se da más la evasión.

Se encarecerá el crédito

Al gravar con IVA la venta, compra y renta de casas-habitación -incluidas las entidades federales como Infonavit y Fovissste- se encarecerá el crédito hipotecario, asegura Luis Pérez de Acha.

Y es que se aplicará de inmediato el 16 por ciento de IVA a los intereses y comisiones que se pagan por esos financiamientos, agrega.

Pero no sólo eso, insiste, como los arrendadores estarán obligados a pagar el IVA -además del ISR que la mayoría no tributa- este impuesto lo trasladarán al arrendatario, lo que creará un mercado informal paralelo.

Sobre todo, dice, porque en México dos terceras partes de los arrendadores no están dados de alta y, por ende, no tributan al fisco.

De manera lineal, expone Pérez de Acha,  quienes compren casa, paguen intereses por créditos hipotecarios y rentas “van a sufrir un impacto de 16 por ciento por concepto del IVA”.

Se puede decir que se va a apoyar a los desarrolladores inmobiliarios para que tengan la posibilidad de acreditar de mejor manera el IVA expedito en automático respecto de los insumos que reciben de terceros, está perfecto, acepta.

Pero en el consumidor final se tiene el impacto que va a inhibir la contratación de créditos para la compra de casas habitación.

Los créditos de vivienda popular aumentarán un 16 por ciento.

‘Dramatismo tributario’

Para Luis Pérez de Acha el tema del arrendamiento tiene su “dramatismo tributario”, pues hay una gran mayoría de los arrendamientos que no cuentan con contratos fiscales porque el dueño no está dado de alta como contribuyente y no paga el ISR.

Operan, dice, en la economía informal “y las hay de todos los perfiles sociales y en todas las zonas”.

Con la iniciativa propuesta ahora se les suma una segunda obligación, pagar el 16 por ciento del IVA que, por supuesto, trasladarán a sus inquilinos. 

La pregunta, remarca, aquí es si el arrendatario está de acuerdo en pagar ese IVA y decidido a trasladarlo a su arrendador, o si ambos acuerdan mejor mantenerse en un esquema informal.

La mayoría de los arrenadamientos no cuentan con contratos fiscales.

Los efectos para el Infonavit

La reforma hacendaria trasladará la factura a los derechohabientes del Infonavit, porque al aplicar el 16 por ciento de IVA a los créditos, intereses y comisiones, tendrán menos capacidad de compra y menos apoyos para pagar sus créditos, reflexiona Pérez de Acha.

La reacción inmediata se observará en las finanzas del Instituto al disminuir el ingreso por cuotas patronales, acreditados en mora y menor movilidad para la venta y construcción de viviendas.

Sobre todo, dice, porque la iniciativa también propone pulverizar las cuotas patronales que conforman la Subcuenta de Vivienda para financiar el seguro de desempleo.

La cuota patronal -equivalente al cinco por ciento del salario del trabajador y que se destina al ahorro para comprar una casa- se dividirá.

El 2 por ciento será para la Subcuenta de Vivienda y el 3 por ciento restante se usaría para financiar el seguro de desempleo, lo que generaría un menor ahorro para adquirir una casa.

En declaraciones hechas a los medios, Eugene Towle, socio director de Softec, estima que con esta división de la cuota patronal para financiar el seguro de desempleo existirá una reducción de los ingresos anuales del instituto

Y con ello una contracción en la inversión crediticia anual que podría pasar de 120 mil millones de pesos al año, a 80 mil millones de pesos.

Incluso, para los trabajadores de menores ingresos, la ampliación en el plazo del crédito puede representar un quebranto a la institución.

Y para quienes ya tienen un crédito, una menor cuota patronal, además de un IVA a los intereses, aumentaría la mensualidad que tendrían que pagar, ya que estas cuotas ayudan a amortizar el pago de la hipoteca.

La reforma hacendaria trasladará la factura a los derechohabientes del Infonavit.

A la baja

La aprobación de la reforma hacendaria puede ocasionar que el valor del mercado de la vivienda en México -que asciende a 1.5 trillones de dólares- caiga 25 por ciento, de acuerdo con estimaciones de Softec.

Además, con el 16 por ciento del IVA a la venta de vivienda podría causar una contracción en las ventas de 2014 del 25 por ciento, con relación a lo que se obtenga al cierre de este año.