“Para nadie debe quedar duda que la Ciudad de México tiene un compromiso claro (…) reiterar el refugio, la protección y la atención a todos los que ejercen el periodismo con plenitud, crítica, en pleno ejercicio de sus derechos y de forma segura”
La Ley de protección a defensores de derechos humanos y periodistas contará también con un fondo que apoye económicamente a quienes soliciten apoyo, hospedaje y vivienda
En medio de la presión política y de la exigencia para que se esclarezca el crimen del fotoperiodista Rubén Espinosa y cuatro mujeres en la colonia Narvarte, una comitiva especial de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal interrogará hoy en Veracruz al principal sospechoso público del asesinato, el gobernador Javier Duarte.
El objetivo de la misión que ordenó el jefe de Gobierno capitalino es obtener la declaración directa del gobernante priista, quien ayer intentó deslindarse de la masacre ocurrida en la Narvarte en la que perdió la vida Ruben Espinosa, fotógrafo que denunció amenazas por parte del gobierno veracruzano.
El gobernador de extracción priista es el centro de la acusaciones por parte de grupos y organizaciones civiles que lo señalan a él de ordenar la muerte de Rubén, de la activistas Nadia Vera y sus acompañantes en el departamento de Luz Saviñón.
En la cima del escándalo, Miguel Ángel Mancera encabezó ayer lunes la entrada en vigor de la Ley para la protección Integral de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas en el Distrito Federal.
Mancera dijo que para su gobierno es importante reiterar que la Ciudad de México sigue siendo el refugio y zona de protección para quienes ejercen el periodismo con plenitud y crítica, y rechazó que se trate de oportunismo político, como algunas voces han señalado.
Lo dijo así en respuesta a la carta que le dirigió un grupo de periodistas, luego de que el fotoperiodista que huyó de Veracruz tras denunciar ser víctima de amenazas fue asesinado en un departamento de la colonia Narvarte, en la delegación Benito Juárez.
En aquella misiva los comunicadores escribieron que ese crimen marcaría para siempre a la Ciudad de México, pues “el refugio se rompió”, en referencia a la seguridad que representaba para los periodistas que huían de otros estados hacia la capital del país.
“El GDF va escuchar las voces, lo que se critica, lo que estamos haciendo mal. Lo que se esté haciendo fuera y que se señale a quienes no estamos cumpliendo con él”, precisó Mancera al encabezar la puesta en marcha de esa Ley, arropado por la organización Artículo 19, que defiende la libertad de expresión en el país.
Requerimientos sin concesiones
El llamado Caso Narvarte se mencionó durante todo el evento, pues antes de iniciar su discurso Miguel Ángel Mancera pidió a los asistentes un minuto de silencio por todos los periodistas que han perdido la vida en el ejercicio de su labor, sin mencionar con precisión que el crimen del fotoreportero Ruben Espinosa fuera un ejemplo de ello.
Más adelante, el jefe de Gobierno abordó de manera directa el multicrimen de la Narvarte, al que calificó como un caso sensible en el que se agotarán todas las líneas de investigación que abrió la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF).
“Este caso tan sensible que tiene la Ciudad de México, el de la colonia Narvarte, se agoten todas las líneas de investigación, todas y cada una, no podemos dejar ninguna hasta en tanto la coadyuvancia y el Ministerio Público estén satisfechos de que se ha agotado”, dijo el mandatario local.
Entrelíneas, Mancera envió un mensaje a su homólogo de Veracruz, Javier Duarte, quien por la mañana ofreció una conferencia de prensa para fijar postura respecto a las acusaciones que señalan a su administración como probable responsable del crimen del fotoreportero, quien salió huyendo de ese estado por amenazas.
“Sea de la autoridad que sea que se tenga que requerir, que no se genere un ámbito de impunidad”, lanzó el jefe de Gobierno de la capital en referencia a la polémica de si se llamará a declarar al gobernador priista por el caso del quíntuple homicidio.
“Para nadie debe quedar duda que la Ciudad de México tiene un compromiso claro que cada día se debe representar. Reiterar el refugio, la protección y la atención de la capital de la República a todos los que ejercen el periodismo con plenitud, crítica, en pleno ejercicio de sus derechos y de forma segura”, puntualizó.
“No es un oportunismo político, es una ley que no podía esperar más, no podía estar en los cajones, exigía su publicación, exigía estar en la vigencia y que cada uno asumiera el compromiso para mejorar las condiciones con una herramienta jurídica”.
Medidas de apoyo y protección
En público, Mancera Espinosa agradeció la presencia y participación de Darío Ramírez, director de la organización Artículo 19, con quien se comprometió a cerrar filar y cumplir a cabalidad con la tarea de brindar protección al gremio periodístico.
Con la nueva ley que entra en vigor, se creará también un Consejo Consultivo que se desempeñe como órgano civil de consulta y encargado de monitorear que las autoridades cumplan con lo que marca dicha norma.
La Ley de protección a defensores de derechos humanos y periodistas contará también con un fondo que apoye económicamente a quienes soliciten apoyo, hospedaje y vivienda.
Entre las medidas que abarca la norma están de tipo preventivo, protección con plazo claro a implementarse en no más de diez días, y también medidas de protección urgente para accionarse en menos de 24 horas.
De acuerdo con la organización Artículo 19, del 2012 a la fecha un promedio de 70 periodistas ha llegado a la Ciudad de México en busca de protección y seguridad, luego de agresiones sufridas en otros estados de la república, donde han sido asesinados al menos 88 en el ejercicio de su profesión.
El deslinde de Duarte
Previo al pronunciamiento de Mancera, el gobernador de Veracruz, Javier Duarte, se adelantó para fijar su postura ante la ola de acusaciones.
Duarte dijo que corresponde a las autoridades del Distrito Federal solicitar la intervención de la Procuraduría General de la República (PGR) para esclarecer el caso del multihomicidio en la Narvarte.
Negó que vaya a renunciar a su cargo luego de los señalamientos que lo responsabilizan de la muerte del fotógrafo que colaboraba para Proceso y la agencia Cuarto Obscuro.
“Personalmente le hablé al jefe de Gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera Espinosa, para ponerme a su disposición para poder apoyar en lo que pudiera hacerlo en este caso, y, de esta manera, pudiera tener los elementos que nosotros pudiéramos otorgarle para esclarecer el caso”, dijo Duarte.
Ambos políticos se pronunciaron desde su trinchera sobre el quíntuple homicidio en la colonia Narvarte.
La exigencia de justicia alcanzó el fin semana al secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, quien fue recibido por periodistas de Aguascalientes con una máscara con la foto de Rubén Espinosa.
La Procuraduría de Justicia capitalina continúa en la tarea de documentar las actividades y relaciones personales de la víctima que enciende los focos rojos, la colombiana Milé Virginia Martín, a quien muchos conocían como Nicole o Simone.
