Hospitales de todo el país están siendo modificados para atender solo a pacientes infectados con Covid-19.
El Hospital Belisario Domínguez es uno de los elegidos de la Secretaría de Salud de la Ciudad de México para dar atención a pacientes con el virus SARS-CoV-2.
Actualmente se está colocando una carpa con 90 camas para la llegada de la fase 3 y desde hace como tres semanas comenzaron a referir a otras clínicas a todos los pacientes que eran atendidos ahí, dice Verónica, quien realiza su residencia en el lugar.
Explica que ya hay un piso lleno de pacientes con coronavirus que están estables, mientras que áreas como cuidados intensivos y cirugía ambulatoria ya se están saturando.
Cuando un paciente infectado es trasladado a que le tomen una radiografía o al área de urgencias vocean que hay un “Código aislado”, y el personal debe esperar a que lo saniticen, cuenta.
“Sí está organizado, sí están las rutas trazadas, sí están las zonas donde están los pacientes dependiendo qué tan graves están.
“Llegan a urgencias y de ahí dependiendo de cómo están los suben a medicina interna, que es donde están estables; o los mandan a cirugía ambulatoria, donde hay más vigilancia y están más críticos.
Pese a la organización, acusa que no hay material y ella ha tenido que comprar su propio equipo de protección.
Sin ayuda a estudiantes expuestos a Covid-19
Carlos es un médico que realiza su residencia en urgenciología en un hospital Covid-19 del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) en la Ciudad de México.
Además del riesgo al que está expuesto por ser uno de los primeros en atender a los pacientes enfermos, se suma la falta de personal médico.
La situación se agrava más para este tipo de especialidades ahora que las universidades han anunciado el retiro de sus estudiantes de medicina al considerar que no tenían garantizadas condiciones de seguridad.
“En el hospital donde yo estoy los médicos internos de pregrado son los que nos ayudan a colocar, a tomar las muestras, a programar estudios, a hacer algunos procedimientos como suturas, colocación de sondas uretrales.
“Y a partir de la declaratoria de que ellos ya no podían estar entonces en este caso los médicos de menor jerarquía, los residentes de primer año como es mi caso, tenemos que realizar estas funciones”, relata.
En su caso también ha tenido que comprar material como guantes y cubrebocas, ya que solo le dan uno por guardia que realiza.