Desde hace varios años, Norma trabaja en el Hospital General de Tláhuac en la Ciudad de México realizando labores de limpieza.
Aunque por su trabajo ella está expuesta a contagiarse de Covid-19, no cuenta con prestaciones laborales y gana el sueldo mínimo.
Nunca ha recibido seguro social, ni otras prestaciones de ley como aguinaldo. Recuerda que en 2019 no le dieron nada y hace dos años le entregaron 200 pesos.
Trabaja ocho horas al día y quincenalmete le pagan mil 845 pesos, pero no recibe ningún comprobante ni tiene contrato. Le depositan su sueldo en una tarjeta, dice.
Debido a la pandemia por el virus del SARS-CoV-2, el Hospital General de Tláhuac, de la Secretaría de Salud (Sedesa) de la Ciudad de México, se convirtió en un Centro Covid, donde solo atienden a pacientes infectados
Sin embargo, las condiciones laborales de Norma, quien pidió que se le cambiara el nombre por temor a represalias, y de sus compañeros, no han mejorado.
Si se enferman, no tienen garantía de que serán atendidos y la empresa no se responsabilizará. Al igual que ella, varios de sus compañeros son personas de la tercera edad y trabajan por necesidad.
“Si nos corren, no nos van a dar ni la retirada, nada”, lamenta.
Al menos en los últimos cinco años, la empresa que contrató a Norma ha cambiado cuatro veces de nombre, entre ellos Joad S.A de C.V. y Grupo Profesional de Servicios U4, pero actualmente ella no sabe cómo se llama. Dice que solo conoce a las personas que la contrataron y que le asignaron sus funciones.
“Todos los papeles se les quedan a ellos, no sabemos en dónde están las oficinas, ya son como tres o cuatro veces que se cambia la empresa, al parecer este mes se va y vuelve a regresar otra, pero es la misma. Lo único que cambia es el logotipo y los uniformes”, menciona.
Norma llegó a ese trabajo por recomendación de una amiga que le dejó su lugar, pero sigue ahí porque es la única forma en la que logra complementar sus ingresos.
Deslindan al gobierno
Durante los últimos seis años, la Sedesa ha pagado más de 32 millones de pesos a cuatro empresas para prestar el servicio de limpieza en sus instalaciones, entre las que se encuentra el Hospital General de Tláhuac.
Los 11 contratos, firmados por adjudicación directa, fueron otorgados a las empresas Grupo Profesional de Servicios U4, Joad Limpieza S.A. de C.V, Norsus S.A de C.V. y Racso S.A. de C.V, del 2016 al 2019.
En los documentos, la dependencia contrata a los proveedores de servicios para llevar a cabo la limpieza en todas las unidades hospitalarias, centros de reclusión y medibuses.
Lo anterior consta en los contratos con número de folio SSCDMX/DGA/239/2016-SP, SSCDMX/DGA/074-A/2016-SP, SSDF/DGA/013/2016, SSCDMX/ DGA/239/2016-RF, SSCDMX/ DGA/240/2016-SP, SSCDMX/ DGA-103-2018-RF, SSCDMX/DGA127-2018, SSCDMX-DGA-145-2019, SSCDMX-DGA-182-2019, SSCDMXDGA-173-A-2019 y SSCDMX-DGA173-B-2019.
En los documentos no se solicita a los proveedores de servicios ofrecer prestaciones de ley a sus empleados.
Sin embargo, sí especifican que no existe ninguna relación laboral entre la Sedesa y el personal de la empresa. Por lo que las autoridades se deslindan de cualquier obligación obrero-patronal.
Por ejemplo, en la cláusula 22 de los contratos firmados en 2019, los más recientes (SSCDMX-DGA-182-2019, SSCDMXDGA-173-A-2019 y SSCDMX-DGA173-B-2019) se detalla que la empresa es la única responsable de cualquier reclamación.
“El proveedor se constituye como único empresario y patrón del personal que utilice para la prestación de los servicios que se deriven de este contrato y será el único responsable de las disposiciones derivadas de la Ley Federal de Trabajo y demás ordenamientos en materia de trabajo y seguridad social”, señala el apartado.
Autoridades responsables de la seguridad de los trabajadores de limpieza
El especialista en derecho laboral de la Universidad Nacional Autónoma de México, Gerardo Hurtado Montiel, afirma que los trabajadores deben exigir prestaciones porque se están exponiendo a un riesgo de contagio que pondría en peligro su vida.
También, el representante legal de la Sedesa o los directores de los hospitales deben pedir que los trabajadores de limpieza tengan todas las herramientas para laborar, entre ellas, el seguro social, dice.
“Deben supervisar o velar para que su centro laboral no sea foco de contaminación ni de riesgo para las personas. Son un servicio necesario y es claro, tienen que ir a trabajar pero que les den las medidas de seguridad, incluidas, el seguro social”, explica.
De lo contrario, se estaría configurando un delito.
“Pueden acudir ante la Secretaría del Trabajo, a quejarse de que no les están dando las herramientas para laborar o pueden ir al Ministerio Público, porque si los exponen en su salud se está configurando un delito”, señala.
Carlos Alberto Rosas, académico de la Universidad La Salle y especialista en derecho laboral, añade que si bien los contratos de prestación de servicios como el de limpieza son temporales, la Sedesa no puede deslindarse y debe aportar las cuotas de seguro social para los trabajadores.
También afirma que la Secretaría del Trabajo puede llamar la atención a las empresas por no dar seguridad social, pero la única autoridad que puede obligarlas a dar la prestación es Conciliación y Arbitraje.
Sin embargo, por la contingencia de coronavirus, los juzgados están cerrados.
