La reforma al Poder Judicial de la Federación propuesta por el Ejecutivo Federal dividió opiniones entre ministros, jueces y magistrados, así como diputados y senadores.
Todos se pronunciaron a favor la reforma al poder judicial, pero la mayoría mantuvo su postura en contra de que la elección de los impartidores de justicia sea por medio del voto popular.
Al arrancar los diálogos nacionales sobre la reforma constitucional al Poder Judicial propuesta por el Ejecutivo en la Cámara de Diputados, las ministras Loretta Ortiz, Jazmín Esquivel y Lenia Batres defendieron la propuesta del Ejecutivo Federal.
Sin embargo, los ministros Javier Laynez, Juan Luis González Alcántara, Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, Mario Pardo Rebolledo y Alberto Pérez Dayán alertaron sobre los riesgos de ese proyecto; señalan que pone riesgo la independencia del Poder Judicial al abrir la puerta a la politización y a jueces “improvisados”. En cambio propusieron que se mantuviera la carrera judicial para acceder a dichos cargos.
Asimismo, plantearon que la sustitución de los actuales juzgadores se realice de manera gradual y paulatina para reducir cualquier afectación en los procesos activos.
Por su parte, diputados y senadores del PAN, PRI, PRD y Movimiento Ciudadano respaldaron la reforma, pero se mostraron en contra de una elección de los juzgadores mediante el voto popular.
Sin embargo, los coordinadores de Morena en el Senado, Ricardo Monreal y en la Cámara de Diputados, Ignacio Mier, afirmaron que la legitimidad democrática de quienes integran los distintos órganos del Poder Judicial deben estar sujetos a la voluntad popular.
“El pueblo nos otorgó el poder reformador de la Constitución. Pero vamos a actuar con prudencia y cautela y vamos a respetar el punto de vista de las minorías y del poder judicial, pero no vamos a desoír el mandato popular, nos debemos a él y vamos a actuar en congruencia”, sentenció Monreal, quien abandonó el foro sin escuchar las opiniones de los ministros y magistrados.