Todo cimbró
Ayer, minutos después de las 7 de la mañana un fuerte estallido sacudió el sur de la capital mexicana.
La explosión de una pipa de gas –al momento que suministraba el hidrocarburo al Hospital Materno Infantil de Cuajimalpa- fue provocada por una supuesta fuga de combustible que no pudo ser controlada.
La explosión dejó prácticamente este sector de la delegación Cuajimalpa como una zona de guerra: el hospital quedó casi convertido en escombros y colapsado. Decenas de viviendas ubicadas alrededor registraron daños en vidrios y paredes.
Hidalgo NeiraAyer, minutos después de las 7 de la mañana un fuerte estallido sacudió el sur de la capital mexicana.
La explosión de una pipa de gas –al momento que suministraba el hidrocarburo al Hospital Materno Infantil de Cuajimalpa- fue provocada por una supuesta fuga de combustible que no pudo ser controlada.
La explosión dejó prácticamente este sector de la delegación Cuajimalpa como una zona de guerra: el hospital quedó casi convertido en escombros y colapsado. Decenas de viviendas ubicadas alrededor registraron daños en vidrios y paredes.
“Se sintió que algo se movió como si fuera un temblor”, contó Casimiro León, vecino del hospital donde ocurrió el percance.
El estallido despertó a Gerson Sánchez Velazquez, vecino del hospital.
“Fue algo… como si temblara muy fuerte, tembló hasta la tierra (…) cimbró todo, las ventanas, puertas, todo como un temblor, no lo había sentido nunca”, contó.
Las autoridades montaron un cerco de seguridad alrededor del sitio.
Miguel Ángel Mancera, jefe del Gobierno del Distrito Federal, y Miguel Ángel Osorio Chong, secretario de Gobernación, asistieron por separado a la zona del siniestro para supervisar las acciones de rescate en la contingencia.
Caos y confusión
En la zona de la explosión imperó el caos y la confusión: llegaron decenas de rescatistas, militares, federales y elementos policiacos para ayudar en las labores.
Las sirenas de los cuerpos de auxilio se convirtieron en un sonido ordinario en esta colonia de Cuajimalpa.
Ocho horas después de la explosión, la pipa de gas propiedad empresa Gas Express Nieto seguía ardiendo.
El conductor de la pipa y sus ayudantes sobrevivieron a la explosion y ayer rendían su declaración en la Procuraduría capitalina.
Reacción en las Redes
Palabras de dolor
Varias personalidades publicaron en sus perfiles de Twitter mensajes de solidaridad con las víctimas y sus familias.
> Viajes gratis
La popular red de servicios de transporte Uber se unió a la cuasa y ofreció viajes gratis a los donantes de sangre. “Uber lamenta profundamente la tragedia causada por la explosión en el Hospital Materno Infantil de Cuajimalpa. Para apoyar en los esfuerzos de la Cruz Roja, hemos decidido sumarnos regalando viajes a todas las personas que quieran donar sangre”, publicaron en su blog. En Twitter, también ofrecieron llevar a los pasajeros a donar fórmula, pañales y ropa de recién nacido.
> Delegado oportunista
En Facebook, el usuario Pablo Armando Reyes Olivares, quien publicó imágenes de la tragedia en su perfil, relató que mientras se encontraba en el devastado hospital ayudando a sacar niños recién nacidos, el delegado Adrián Rubalcaba sacó a los ahí presentes del sitio ya que “se estaba tomando fotos en la escena”. “Señor delegado chingue usted a su madre”, concluyó el cibernauta en su mensaje.
> Estruendo in fraganti
El momento de la explosión fue captado por un residente de Cuajimalpa cuando este grababa las labores de los bomberos que acudieron a revisar la fuga de gas. El impresionante video –publicado momentos después del incidente– fue subido a YouTube por el usuario Maximino Aviña Hurtado.