Asentamientos irregulares: ¿Legalizar lo ilegal?
En la delegación Tlalpan son más los asentamientos humanos irregulares, 192, que las colonias y barrios bajo las normas de las autoridades, 144.
Los asentamientos irregulares que se expandieron en suelo de conservación y áreas naturales protegidas de esta demarcación confrontan a las autoridades de la Delegación Tlalpan, que gobierna la morenista Claudia Sheinbaum, con las del Medio Ambiente del gobierno central, que exige se pague por la pérdida de servicios.
Icela Lagunas
En la delegación Tlalpan son más los asentamientos humanos irregulares, 192, que las colonias y barrios bajo las normas de las autoridades, 144.
Los asentamientos irregulares que se expandieron en suelo de conservación y áreas naturales protegidas de esta demarcación confrontan a las autoridades de la Delegación Tlalpan, que gobierna la morenista Claudia Sheinbaum, con las del Medio Ambiente del gobierno central, que exige se pague por la pérdida de servicios.
No obstante, el Programa Delegacional De Desarrollo Urbano para la Delegación Tlalpan publicado en agosto de 2010 permite establecer convenios de ordenamiento territorial en asentamientos humanos irregulares sujetos bajo ciertas normas.
La delegada promueve en la Asamblea Legislativa y ante diversas instancias del Gobierno de la Ciudad de México la regulación de 21 de los 192 asentamientos irregulares que existen en la demarcación, con el argumento de que tienen más de 30 años de antigüedad y están consolidados como colonias.
En este paquete de asentamientos a los que se busca cambiar el uso de suelo viven poco más de mil 600 familias, cuyos padres o abuelos llegaron a invadir estas zonas de manera ilegal.
De los 21 que se propone regular, 11 están en área natural protegida: Atocpa, Atocpa Sur, Cerrada de Sierra de San Juan, Cerrada UH Porfirio Díaz, Primavera, Verano, Tlalmille, Paraje Atenco, Cerrada Porfirio Díaz, Lomas de Cuilotepec y Tepetongo.
Los otros diez están en suelo de conservación: Bosques de Tepeximilpa, Carrasco, Cuchilla Tepeximilpa, Diamante San Andrés, Diamante TEpeximilpa, Dolores Tlalli, Tecoantitla Xolalpa, Tepetlica 12 de Diciembre, Valle Verde y Zacatón.
La mayoría de estos asentamientos tienen viviendas consolidadas y cuentan con servicios públicos como alumbrado, camión recolector de basura, electricidad, fosa séptima, agua potable y pavimentación.
Aunque se cuenta con las opiniones favorables de diversas dependencias, como la Procuraduría Ambiental y Ordenamiento Territorial (PAOT), la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda (Seduvi), el procedimiento no logra cuajar.
Añeja necesidad
El titular de Seduvi, Felipe de Jesús Gutiérrez, ha manifestado que el beneficio de regularizar estos 21 asentamientos se verá reflejado en la ciudad y las personas que habitan en estos terrenos.
La idea de regularizar no es nueva. Desde hace cuatro años Carlos Hernández Mirón, quien fuera servidor público en Tlalpan durante la administración de Higinio Chávez (2009-2012) y después asumiera la Comisión de Desarrollo Urbano de la Asamblea Legislativa en calidad de diputado local del PRD, propuso el reordenamiento de 26 de los 192 asentamientos irregulares.
Desde el 2013, el entonces legislador local y hoy diputado federal propuso entregarles el uso de suelo para viviendas a aquellos asentamientos que tuvieran entre 35 a 40 años de antigüedad. Sin embargo, no prosperó su iniciativa.
Lejos de eso, cuando Claudia Sheimbaun asumió la jefatura delegacional en Tlalpan exhibió a Carlos Hernández en suelo de conservación en la zona del Ajusco.
La aportación pactada
En el actual debate se analiza lo que establece el Plan de Desarrollo Urbano Delegacional para proceder a la regularización.
Es un convenio entre la delegación y los pobladores de esos asentamientos irregulares en los que se comprometen a realizar un pago compensatorio por la pérdida de servicios ambientales.
“El asentamiento deberá aportar suelo para constituir reserva territorial, la donación del 10 por ciento de la superficie total ocupada al interior del polígono del asentamiento que será utilizado para la reubicación de la población de otros asentamientos irregulares”.
Puntualiza que se podrá realizar un pago sustitutivo para adquirir predios para este mismo fin.
La Delegación Tlalpan detalla que donar el 10 por ciento del territorio no aplica porque en 17 de los 21 asentamientos en cuestión no hay áreas libres, y en los cuatro restantes los lotes libres cuentan con propietarios, quienes presentaron documentos de compraventa, según las encuestas socioeconómicas del estudio en mención.
“Respecto al pago para la adquisición de reserva territorial o equipamiento, es indispensable reconocer la situación socioeconómica de los habitantes de los 21 asentamientos irregulares”, precisa el documento.
Con historia
La Delegación Tlalpan pretende convencer al gobierno central de regularizar los predios:
>> 192
Asentamientos irregulares existen en la demarcación
>> 30
Años de antigüedad tienen estos asentamientos
>> 21
Asentamientos irregulares son los que se busca legalizar
>> 1,600
Familias viven en esos 21 asentamientos, la mayoría son la tercera generación
Trabajo comunitario
El estudio de ingresos promedio entre los habitantes de dichos asentamientos detalla que la mayoría percibe entre dos a seis salarios mínimos por familia.
Por eso se planteó permitirle a los pobladores de estos asentamientos realizar obras de compensación junto con la delegación, en lugar de pagar por la pérdida de servicios ambientales que ocasionaron al ocupar estos terrenos.
La propuesta precisa que los daños ambientales ocasionados por estos asentamientos son fundamentales: infiltración, biodiversidad, erosión, CO2 y contaminación.
Plantea como medidas de compensación reforestar zonas limítrofes, conservación de suelo y agua, manejo adecuado de residuos sólidos y mantener la infiltración perdida a partir de obras de mitigación.
La propuesta causa escozor y genera el planteamiento de, si lejos de castigar, incentiva el crecimiento de la mancha urbana en la capital.
El destino de los 21 asentamientos de Tlalpan que están en esta propuesta podrían abrir el camino para los 800 asentamientos irregulares que existen en la Ciudad de México en diversas delegaciones.