Roberto Antonio Rubio Montejo, ex funcionario del gobernador Manuel Velasco, fue acusado de falsificar documentación y de hacerse pasar como indígena de Chiapas, para poder ser aspirante a una diputación federal.
Y a pesar de lo anterior, será diputado federal, ya que a pesar de que la Sala Regional Xalapa del TEPJF había anulado la victoria de la fórmula de Rubio Montejo y Rogelio Rayo Martínez (de la coalición Todos por México), en el distrito 11, al no cumplir “con el requisito de autoadscripción indígena”, ambos candidatos y el Partido Nueva Alianza (Panal) presentaron recursos de reconsideración. Y lograron su cometido.
El argumento que dio a lugar la Sala Superior es que la demanda de impugnación de la coalición Juntos Haremos Historia, que postuló la pareja integrada por Yanet Martínez Domínguez y María Magdalena Hernández Méndez, fue presentada “fuera del término de cuatro días establecidos por la ley”.
Por lo que el Pleno de la Sala Superior, “quedó firme el cómputo distrital y la constancia de mayoría y validez de la elección otorgada a Rubio Montejo y Rayo Martínez.
En este caso no solo se dio la usurpación de la identidad indígena, sino que además, se incumplió con la paridad de género, ya que debió ser una mujer la ganadora de la curul que le correspondía al pueblo indígena tojolabal de Las Margaritas.
La votación de la Sala Superior, fue seis a favor, y solo uno en contra.