Telemedicina, un legado de la pandemia que buscan expandir en la CDMX

La emergencia sanitaria por COVID-19 dejó un aumento a nivel mundial del uso de alternativas de atención médica como la telemedicina, instrumento que la Secretaría de Educación, Ciencia, Tecnología e Innovación (SECTEI) de la Ciudad de México (CDMX) busca incentivar para ampliar la cobertura de servicios de salud.

A través de la Red ECOs, la dependencia impulsa un modelo de colaboración interinstitucional para responder a las diversas necesidades de la población mediante seis ejes, entre ellos, el de Ciencias de la Salud, explica a Reporte Índigo, Ofelia Angulo Guerrero, titular de la SECTEI.

La funcionaria describe, como parte de las acciones para lograr este objetivo, la campaña implementada en coordinación con el Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán (INCMNSZ), que tiene la finalidad de brindar atención médica a distancia a pacientes con diversos padecimientos, así como incentivar la donación de los trasplantes de riñón.

“La campaña surge del modelo de colaboración interinstitucional e intergubernamental que hemos implementado en la CDMX desde hace ya más de cuatro años y lo que busca es sumar esfuerzos para atender retos que enfrenta la ciudadanía.

“Este programa de telemedicina que está en curso atiende tres temas, las personas con necesidad de control de la diabetes, personas mayores con fragilidad, un concepto que se maneja poco, y la cultura de la donación de órganos”, menciona.

CDMX, entre las entidades con mayor número de defunciones por diabetes mellitus

La telemedicina, según la Organización Mundial de la Salud, es una prestación de servicio a través de las Tecnologías de la Información y Comunicación con el objetivo de cuidar la salud de la población y de la comunidad.

El informe “Telemedicina durante la pandemia por COVID-19”, elaborado por especialistas del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias Ismael Cosío Villegas y el Centro Nacional de Excelencia Tecnología en Salud, revela que la Ciudad de México se encuentra entre las entidades con mayor número de sistemas de telemedicina, con mil 36; sin embargo, Chiapas encabeza la lista con 3 mil 941.

En materia de salud, la capital del país es la séptima entidad con mayor número de defunciones registradas por diabetes mellitus con una tasa del 102.6 por cada 100 mil habitantes, indican los resultados de las Estadísticas de Defunciones Registradas del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).

La fragilidad en adultos mayores, se trata de un síndrome geriátrico que se caracteriza por la disminución de la fuerza y resistencia, con incremento en la vulnerabilidad frente a agentes estresores (eventos que pueden desencadenar estrés) de baja intensidad, detalla información difundida por la SECTEI.

Datos del Sistema de Desarrollo Integral de la Familia (DIF) indican, con base en datos del INEGI, que para 2020 se tenía una población mayor a 65 años de edad en la CDMX de 1.02 millones, “un 48 por ciento más que en el último registro de 2015”.

‘Sistema de atención cómodo, seguro y eficiente’

El fin de la campaña desarrollada entre la SECTEI y el INCMNSZ, de acuerdo con el doctor Luis Dávila Maldonado, coordinador de la Unidad de Educación para la Salud de dicho Instituto y quien preside la estrategia, es ofrecer un sistema de atención cómodo, seguro y eficiente en medicina preventiva y correctiva.

“Pensamos que tanto el diabético como el adulto mayor y el paciente con historia de trasplante se pueden beneficiar de un sistema de telemedicina y de atención o entrevistas médicas a distancia.

“Esa es la finalidad que, obviamente no es exclusiva de estas líneas y podría atenderse a muchos pacientes, pero, como con todo, hay que empezar por algunos aspectos primordiales”, detalla en entrevista.

Características de la campaña ¿a qué pacientes va dirigida?

Precisa que uno de los pilares de atención, por medio del Centro de Atención Integral del Paciente, son las personas mayores de 18 años con diagnóstico de diabetes no mayor a cinco años o que no tengan complicaciones graves como insuficiencia renal, alguna amputación, entre otras.

“En este perfil del diabético, en los primeros años de tener cifras altas de azúcar en sangre, le ofrecemos un sistema de atención a distancia con citas seriales donde, por un sistema de telemedicina, lo contactamos y lo orientamos mensualmente de manera gratuita con un grupo multidisciplinario de especialistas. Se les da información con enfoque global”, comenta.

En el caso del síndrome de fragilidad en personas mayores, Dávila dice que el primer paso es que la o el interesado responda un breve cuestionario y, partir de ahí, se le realiza la intervención a distancia de tipo multidisciplinaria con diversos especialistas del INCMNSZ para que tengan una mejor nutrición, ejercicios físicos o apoyo social.

Buscan incentivar cultura de la donación de órganos

Respecto a la cultura de la donación de órganos, el especialista afirma que pretenden incentivar la conversación del tema al interior de los hogares y que las personas puedan decidir con anticipación si, en caso de algún accidente o problema, están dispuestas o no a donar sus órganos.

Expresa que existe un fenómeno global en el que se ha observado que los trasplantes de riñón suelen ser exitosos y que los donadores vivos son, en su mayoría, familiares o personas cercanas, por lo que esperan atraer a los donadores y receptores a solicitar consultas a distancia para dar seguimiento a su atención médica.

El Boletín Estadístico Informativo del Centro Nacional de Trasplantes (Cenatra) Vol. VII, No.1, del periodo enero-diciembre de 2022, señala que la capital del país cuenta con 93 establecimientos de salud autorizados para procuración, trasplante y banco de órganos.

De dicha cifra, 66 son para procuración, de los cuales 44 cuentan con actividad; en 71 centros se pueden llevar a cabo trasplantes, pero solo 36 están en actividad; y hay un total de 12 bancos.

En lo relativo al trasplante de riñón, la CDMX cuenta con 41 programas autorizados; de estos, 30 están en activo; y, durante 2022, se contabilizaron en la entidad 167 riñones procurados por donantes fallecidos y 3 mil 267 personas en lista de espera para recibir un trasplante de riñón.