Taxis pirata hacen su ‘agosto’ en pleno diciembre por crisis de movilidad
Vehículos sin permiso para circular como taxis aprovechan falta de transporte público para 'ofrecer' sus servicios
Indigo StaffEl cierre temporal de seis estaciones de Metrorrey, además de la falta de unidades en rutas de camión urbanas, han provocado una “tormenta perfecta” para transeúntes de la Zona Metropolitana de Monterrey, quienes se ven forzados a considerar la utilización de “taxis pirata” para desplazarse.
La problemática de movilidad es notoria en estaciones como Sendero y San Nicolás, donde todos los días pueden observarse largas filas para abordar los camiones dispuestos por el Gobierno de Nuevo León en un intento de “compensar” la falta de servicio en el Metro.
El tiempo de espera es tan largo que, en ocasiones, los usuarios prefieren hacer uso de los “taxis pirata“, vehículos que no cuentan con ningún tipo de permiso para operar como transporte público, con tal de llegar a tiempo a sus hogares o centros de trabajo.
“La verdad yo los uso porque es más rápido; con este frío nadie quiere estar ahí enfriándose para que luego el camión venga lleno y no se pare, o de plano no quepas”, apuntó Armando, ciudadano quien todos los días se desplaza desde el municipio de El Carmen para ir a trabajar.
El auge del servicio es tal, que a unos cuantos metros de la estación Sendero existe un paradero de “taxis pirata” que funcionan como transporte público para personas que se trasladan a colonias de dicho municipio, como El Jaral, Villas del Arco y Alianza Real, entre otras.
El precio del servicio varía, aunque la tarifa más común es la de 25 pesos por persona, siendo cuatro el número máximo de pasajeros por vehículo; esto representa un aumento del 60 por ciento en el costo de traslado para los usuarios, quienes se ven obligados a pagarlo para llegar a tiempo a sus compromisos laborales.
Proliferan ‘taxis pirata’ en varias zonas
El “florecimiento” del servicio no es exclusivo de San Nicolás; en los municipios de Escobedo y García es bastante común observar a estos vehículos sin permiso, que ofrecen recorridos a mayor precio.
Lo mismo ocurre en la colonia Independencia, donde la falta de transporte en las partes más altas y la negativa de taxis y carros de aplicación de internarse en la zona han desembocado en un auge de “taxis pirata”.
Aunque el tiempo de recorrido es menor, viajar en uno de estos vehículos implica un riesgo, no sólo por el nulo control de la ruta y el desconocimiento total acerca de la documentación del chofer, sino porque muchos de ellos circulan sin contar con seguro, poniendo a los usuarios en un riesgo constante.