Un intento de asesinato a un mando policiaco y un ataque armado con un saldo de cinco muertos y tres heridos en un bar de la zona Centro fue el resultado de la jornada violenta que se vivió este fin de semana en el estado de Tabasco.
Estos hechos transformaron el ambiente positivo de la fiestas patrias en luto e incertidumbre de una ola de violencia que comienza a aquejar al también llamado “Edén”.
En tan sólo un año, esta región del sureste ha sufrido un aumento del 20 por ciento en los crímenes de alto impacto registrados por el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP); una cifra que no solo repercute en el ánimo de la población sino que se percibe también en la atracción de inversiones y la derrama económica que se genera en la entidad.
408
Hasta el momento, la estrategia emprendida por el gobernador Adán Augusto López Hernández –en coordinación con las fuerzas de la Federación– no ha podido ser capaz de contener los embates de las células del crimen organizado, quienes respondieron de forma violenta contra la estrategia de combate al robo de hidrocarburos emprendida por la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO).
“Lamentablemente son hechos que están ocurriendo y que preocupan por la afectación, más que a la percepción, a la realidad que estamos viviendo”, comenta en entrevista para Reporte Índigo Ovidio Peralta Suárez, senador por el estado tabasqueño.
El legislador considera que este fenómeno de violencia se viene gestando desde mucho tiempo atrás, “por cuestiones que se fueron forjando a través del tiempo”, y es generado por diversas causas, por lo que no se le puede atribuir en su totalidad a la administración actual. Sin embargo, reconoció que la estrategia del combate al ‘huachicol’ y la coordinación de los tres niveles de gobierno fomentaron las reacciones violentas de los grupos criminales.
“No tenemos que descartar que la administración municipal, estatal y federal ha comenzado un trabajo de coordinación que anteriormente no existía. Entonces puede ser hasta un efecto ‘cucaracha’”, menciona.
El titular de la Secretaría de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval, aseguró para finales del mes de agosto que Tabasco ocupa el primer lugar a nivel nacional en la recuperación de combustible robado, con un total de 3 millones 478 mil 243 litros.
Una pérdida importante para los grupos criminales que operan en la zona sur del territorio mexicano.
Efecto dominó
Para el primer semestre del 2019, el SESNSP reportó 408 víctimas por asesinatos dolosos en Tabasco, un aumento considerable en comparación con los 340 casos registrados durante el mismo periodo en 2018.
De acuerdo con el Observatorio Ciudadano de Tabasco (OCT), durante el trimestre de abril a junio de este año, delitos como la violación crecieron 45.16 por ciento, el homicidio culposo 17.92 por ciento y el homicidio doloso en conjunto con el feminicidio 11.04 por ciento. De igual forma destacan que el hecho de que la entidad continúe liderando las primeras diez posiciones del ranking nacional en once delitos demuestra la urgencia de que el tema sea atendido de forma prioritaria por la autoridad.
“Urge contar con un Plan Integral de seguridad donde se definan las estrategias y objetivos concretos y medibles en el corto, mediano y largo plazo que permitan mejorar las condiciones de seguridad”, menciona el organismo en su reporte trimestral.
Por desgracia, el alza en la inseguridad tiene consecuencias directas en otros aspectos, tales como la atracción de recursos y la creación de nuevas fuentes de empleo.
“Principalmente hay dos problemas que han sido la constante desde el año pasado y que todavía se tiene que trabajar mucho para poder disminuirlos. En primer lugar tenemos el tema de la inseguridad, que no es un secreto y en segundo el tema del empleo”, afirma el senador Peralta Suárez.
A pesar de la realidad adversa, el senador dijo confiar en que poco a poco comience a moverse la economía regional, esto gracias a la inyección de más de 2 mil millones de pesos bimestrales a través de los programas impulsados por el gobierno de la Cuarta Transformación.
Inyección económica a Tabasco
Para Ricardo Castellanos, presidente de Coparmex en Tabasco, el fenómeno de la violencia y el desempleo que sufren los habitantes de la entidad van de la mano. Y para combatirlo se tienen que emplear estrategias que integren al sector empresarial.
“Tenemos claro que existen diferentes factores que han detonado este indicador (de inseguridad), uno de ellos precisamente va de la mano con el desempleo que vivimos hasta el día de hoy.
La pérdida de miles de empleos generó que los índices de inseguridad se dispararan. Y es bien sabido por todos que ése es el ‘Talón de Aquiles’ que tiene el gobierno y de todos los que vivimos aquí en el estado
En su encuesta de ocupación y empleo, el INEGI indicó que Tabasco tuvo una tasa de desocupación del 6.3 por ciento durante julio del 2019; únicamente 0.2 por ciento más bajo que en el mismo periodo del 2018; pero aún así cuenta con la cifra más alta registrada a nivel nacional.
“Al primer trimestre de este año solamente se habían generado 607 empleos formales de los 11 mil que necesitamos anualmente para poder cambiar la balanza que se tiene en el tema de desempleo.
“(En contraste), tuvimos un incremento del empleo informal hasta del 66 por ciento. Esto es un tema que nos preocupa y nos ocupa a todos porque tenemos ahí una competencia desleal; tenemos trabajadores que no están percibiendo las prestaciones por ley y por ende nos golpea a todos”, menciona el presidente regional de Coparmex.
607
Castellanos aseguró que hasta el momento existe voluntad política para contrarrestar este fenómeno que golpea en doble sentido a los tabasqueños, pero que para ello se necesita involucrar más a la inversión privada en los proyectos estatales y no descartar la búsqueda de la reactivación de la economía mediante el fomento a nuevos sectores industriales.
6.3
“No debemos de voltear la cara hacia la posibilidad de poder industrializar al estado y atraer temas de tecnología. Solamente generando y creando empresa es como vamos a poder darle un crecimiento sostenido. Y otro de los puntos importantes es que se considere a los empresarios locales en los macroproyectos que se están generando en el estado.
“Para nosotros sí hay oportunidades, sí hay tela de donde cortar para revertir estos indicadores, pero se requiere de muchísima inversión y se requiere priorizar a la inversión privada a través de proyectos productivos”, concluye.
En la entidad tabasqueña el empleo informal creció un 66 por ciento, a este problema se suma el desempleo y la poca atracción de inversiones en la región
