¿Sus días están contados?
Todo parece estar listo para que esta semana el gobierno envíe al Congreso su iniciativa de Ley de Telecomunicaciones.
Se planteará a los legisladores la necesidad de sustituir la Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel) por el Instituto Federal de Telecomunicaciones.
Además, se propondrá la remoción de los cinco comisionados de la Cofetel y el nombramiento directo de los nuevos desde Los Pinos.
Georgina Howard
Todo parece estar listo para que esta semana el gobierno envíe al Congreso su iniciativa de Ley de Telecomunicaciones.
Se planteará a los legisladores la necesidad de sustituir la Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel) por el Instituto Federal de Telecomunicaciones.
Además, se propondrá la remoción de los cinco comisionados de la Cofetel y el nombramiento directo de los nuevos desde Los Pinos.
Aunque no se ha confirmado todavía se produciría la salida del comisionado presidente Mony de Swaan, sí se plantea el cambio de los otros cuatro: Gonzalo Martínez Pous, José Luis Peralta, Alexis Milo Caraza y José Ernesto Gil Elorduy.
La razón, y lo han denunciado ya desde varios sectores, es que los actuales comisionados están cooptados por los partidos políticos.
Hasta ahora la iniciativa se ha manejado al máximo nivel de la cúpula de los partidos. Entre los estrategas de la misma, están el actual titular de la SCT, el priista Gerardo Ruiz Esparza; Santiago Creel, del PAN y Pablo Gómez, del PRD.
Se buscaría, en principio, que el nombramiento y la duración del cargo de los comisionados sea transexenal para eliminar intereses de los particulares.
Protesta patronal
La propuesta ha generado la inconformidad de los empresarios de telefonía y televisión: Carlos Slim de Telmex y Emilio Azcárraga-Ricardo Salinas de Televisa y TVAzteca.
La sugerencia de la patronal, a través de la denominada telebancada, es que sea el propio Senado de la República el que de a conocer los nuevos nombramientos.
Incluso, consideran que sea la propia Cofetel y no el IFT el que siga como órgano rector.
Sin embargo, todo parece indicar que será el propio presidente Enrique Peña Nieto quien envie los nombres a la Cámara Alta.
También, se propondrá la desmonopolización de la telefonía y la televisión para lo que tendrá que desmembrarse el 40 por ciento de los activos que controlan Slim y Azcárraga.
Pero si quieren que la iniciativa sea efectiva, confiesa una fuente a Reporte Indigo, la iniciativa deberá ofrecer la fibra óptica que no utiliza el gobierno y modificar la Ley de Inversión Extranjera.
Una parte esencial, dice esa misma fuente, será la creación de una sola legislación que unifique la Ley de Telecomunicaciones con la de Radio y Televisión, para promover la competencia en radio, televisión y telefonía de manera simultánea porque el avance tecnológico del país así lo demanda.
De acuerdo a esa misma fuente, si no se hace de esa manera, sería tanto como “darle atole con el dedo” a los mexicanos. Lo que se requiere, menciona, es que Telmex verdaderamente ofrezca banda ancha para todos.
Pero además, que la Cofetel o el organismo que la sustituya haga, realmente, las recomendaciones a la SCT para establecer sanciones.
En pocas palabras, que tenga dientes para hacer aplicar la ley y poner sanción.
Debe definirse, también, que la Cofetel no quiera asumir el poder dominante pues ese le corresponde por mandato constitucional a la Comisión Federal de Competencia (Cofeco).
Hoy se pretende disfrazar esta función aduciendo doble ventanilla, cuando cada organismo tiene su responsabilidad.
Según la fuente consultada, la propuesta de Ley de Telecomunicaciones tendría que salir esta semana para discutirse en los próximos días en los que comienza el Foro de Competitividad en la Cámara de Diputados.
La razón, opina, “es que se pelotearían dos temas al mismo tiempo” y no habría tanto jaloneo con la telebancada.
De lograrse dicho objetivo, después de Semana Santa habría nueva legislación en la materia.
Cadenas en abierto
Aunque son muchas las voces que anticipaban un no a las nuevas cadenas de TV abierta, la propuesta del gobierno es sí irán.
Sobre todo, porque significan un contrapeso eficaz al acaparamiento de frecuencias que hoy ejercen Televisa y Televisión Azteca.
De ahí que las reglas de asignación de nuevas cadenas de television que serán anunciadas en la iniciativa, buscarán: promover la competencia, mejorar la calidad de la programación y fortalecer la producción independiente.
La iniciativa buscará que las nuevas cadenas nacionales sean parte de un sistema nacional de televisión pública, manejado por un organismo con autonomía.
Y la obligación de que los sistemas de televisión de pago difundan las señales de TV abierta.
Esta propuesta, lanzada por la diputada perredista Purificación Carpinteyro romperá el monopolio que Televisa y TV Azteca han mantenido en perjuicio de sistemas de televisión codificada, apunta el documento.
De Swaan se defiende
Ante las versiones que circulan en algunos medios del gobierno sobre una posible desaparición de Cofetel y la remoción de sus comisionados, Mony de Swaan se defiende.
En días pasados el comisionado presidente envió un comunicado a los medios para advertir sobre el riesgo de que la reforma del sector de telecomunicaciones puede convertir a la Cofetel en “un botín politico”,
Lo relevante, advertía, “es no perder el foco” de lo importante que son los proyectos y la eficiencia de las instituciones.
Consideraba que siempre que se revisan los entramados de la regulación aparece un cierto riesgo y la preocupación de que la Comisión pierda su carácter técnico y se convierta en una entidad política.
“Al margen de cómo han sido nombrados tanto los presidentes como algunos de los comisionados de la Cofetel, este órgano se ha fijado realizar un trabajo básicamente técnico y en la medida en que haya intenciones por partidizar sus tareas, en lugar de fortalecerla, se le estaría debilitando”.
En su opinión, “el Pacto por México” permitiría tener una comisión mucho más fuerte o un propósito específico, pero no hay elementos necesarios para empujar y generar mayor competencia en el país.
“Desde la creación del órgano regulador han pasado cinco presidentes y veintitantos comisionados y México sigue rezagado, con lo cual es evidente que las personas que han conformado la Comisión no han sido el problema”.
El problema, confesaría, es un marco institucional ineficaz, facultades insuficientes y la ausencia de proyectos e inversiones públicas y privadas en el sector.
Para la presidenta de Observatel, Irene Levy, la reforma del sector de las telecomunicaciones tiene el riesgo de convertirse en un instrumento revanchista de los partidos políticos.
La especialista destacó que la autonomía del órgano regulador es un factor clave para el desarrollo del sector, pero se debe tener especial cuidado en el diseño.
“Sería suficiente con que se fortalecieran las facultades de Cofetel en la Ley Federal de Telecomunicaciones, se eliminará la existencia de la doble ventanilla y se creara un mecanismo de rendición de cuentas, hacer una reforma legal completa” , apuntó.
Lo que sí va
> Homologar concesiones
> Crear licencias únicas para la prestación de servicios convergentes de telecomunicaciones
> Contenidos Audiovisuales autónomos para prevenir riesgos de captura regulatoria
> Reglas para que la digitalización de la televisión que signifique más canales, mediante la multiprogramación, y más operadores no sólo para los actuales concesionarios
> Puesta en marcha de una Comisión Nacional de Banda Ancha que diseñe políticas públicas y coordine una agenda digital
> Se crearán tribunales especializados para solucionar la perpetuación de litigios
Los candados
> La radio y televisión pública dejará de estar supeditada a las voluntades de los gobernadores o del gobierno federal.
> Se regulará la programación y publicidad destinada al público infantil, para que procure su sano desenvolvimiento físico y mental.
> Se establecerán sanciones para evitar la reincidencia de prácticas monopólicas entre los radiodifusores y operadores de telecomunicaciones.