Elba Esther, regreso a casa
Con la disyuntiva por resolver sobre el domicilio en donde enfrentará la prisión domiciliaria para lo que resta de su proceso penal, en esta semana Elba Esther Gordillo Morales podría dejar el sanatorio en donde está recluida.
La exdirigente nacional del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) logró, apenas hace unos días, un amparo de la justicia federal para dejar la prisión formal y enfrentar el resto de su proceso en un domicilio particular; aunque seguirá bajo la vigilancia del Estado, mejorarán sus condiciones de reclusión.
J. Jesús Lemus
Con la disyuntiva por resolver sobre el domicilio en donde enfrentará la prisión domiciliaria para lo que resta de su proceso penal, en esta semana Elba Esther Gordillo Morales podría dejar el sanatorio en donde está recluida.
La exdirigente nacional del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) logró, apenas hace unos días, un amparo de la justicia federal para dejar la prisión formal y enfrentar el resto de su proceso en un domicilio particular; aunque seguirá bajo la vigilancia del Estado, mejorarán sus condiciones de reclusión.
La disyuntiva que ahora revisa el juez de la causa, Alejandro Caballero Vértiz, es decidir sobre cuál de los domicilios propuestos por la defensa de la maestra Gordillo, encabezada por el abogado Marco Antonio del Toro Carazo, cumple con los requisitos legales para garantizar la seguridad de la procesada y evitar que se sustraiga de la acción de la justicia.
Entre los domicilios que la defensa ha propuesto se encuentra un departamento en la exclusiva zona de Polanco, en la Ciudad de México, y una casa en la ciudad de Puebla.
El Quinto Tribunal Colegiado en Materia Penal otorgó el beneficio de la prisión domiciliaria a Gordillo en base a los argumentos de la defensa, que interpuso como causa principal la deteriorada salud de la procesada, considerada por tres peritos en la materia como “frágil”.
El argumento de mayor peso fue presentado por el médico personal de la maestra, Jesús Francisco Calliser, quien aseguró que su paciente padece diez enfermedades crónicas, entre ellas hepatitis viral tipo C, insuficiencia renal moderada e hipertensión arterial sistemática secundaria.
El Quinto Tribunal Colegiado de lo Penal se acogió a lo establecido en el artículo 55 del Código Penal federal, en donde se señala que “cuando la orden de aprehensión se dicte en contra de una persona mayor de 70 años de edad, el juez podrá ordenar que la prisión preventiva se lleve a cabo en el domicilio del indiciado bajo las medidas de seguridad que procedan de acuerdo con la representación social”.
En opinión del abogado penalista Luis Soriano, se observa difícil, en base a derecho, que Gordillo vuelva a prisión aunque se le dicte sentencia condenatoria.
Lo anterior sustentado en el mismo artículo 55 del Código Penal federal: “una vez dictada la sentencia ejecutoriada, la pena podrá ser sustituida por una medida de seguridad, a juicio del juez o tribunal que la imponga de oficio o a petición de parte, cuando por haber sufrido el sujeto activo consecuencias graves en su persona, o por su senilidad o su precario estado de salud, fuere notoriamente innecesaria o irracional que se compurgue dicha pena”.
Mejoría sustancial
Elba Esther Gordillo Morales, quien el 6 de febrero cumplió 72 años de edad y el pasado domingo 26 cumplió cuatro años de prisión, está acusada de operaciones con recursos de procedencia ilícita y delincuencia organizada, luego de ser señalada de haber sustraído más de 2 mil 600 millones de pesos, propiedad del sindicato.
También fue señalada, sin éxito por parte de la PGR, de defraudación fiscal.
La defensa de la exdirigente del SNTE ya había obtenido el beneficio de sustraerla del penal de Santa Martha Acatitla, bajo el argumento de su delicado estado de salud, para ser internada en el Hospital Xoco, de la Ciudad de México.
El 26 de enero del 2016, recibió otro beneficio al ser internada en el hospital María José Roma de la colonia Roma, también en la Ciudad de México, donde se mantiene a la espera de ser reubicada a un domicilio particular.
La defensa de la maestra Elba Esther Gordillo es encabezada por el abogado Marco Antonio del Toro Carazo, uno de los penalistas más importantes de México, de origen costarricense, quien ha sido defensor del dirigente nacional del sindicato de mineros, Napoleón Gómez Urrutia; del cantante Alejandro Fernández; del gobernador de Jalisco, Aristóteles Sandoval, y de Petróleos Mexicanos, en el caso “Pemexgate”, donde fue acusado penalmente Carlos Romero Deschamps, líder del sindicato petrolero.
De la prisión a una mansión
El juez que decidirá en los próximos días sobre el sitio que albergará a Elba Esther Gordillo en lo que resta de su proceso penal, es Alejandro Caballero Vértiz, habilitado en el cargo desde el 27 de junio del 2001.
Es abogado por la Universidad de Guanajuato y se ha desempeñado como actuario, secretario proyectista, secretario de juzgado, secretario técnico de la judicatura y juez de distrito.
A este juez, que mantiene prestigio dentro de la judicatura federal, y que ha llevado casos mediáticos como el de Luis Téllez, extitular de la SCT, contra Purificación Carpinteyro, o el de la Secretaría de Hacienda contra la actriz Galilea Montijo, tocará decidir a qué mansión manda a Gordillo a esperar el dictamen de su sentencia.
De acuerdo a versiones de allegados al proceso, la defensa de la exlíder del SNTE ha presentado al juez de la causa una lista de al menos ocho residencias, como sitios probables para que la profesora cumpla con la prisión domiciliaria que ha sido autorizada.
Entre los domicilios está un penthouse en el número 7 de la calle Galileo, en la colonia Polanco de la Ciudad de México, donde -de acuerdo a vecinos- se ha registrado movimiento desde hace una semana.
Lujosa celda
Estos son los inmuebles que están a elección del juez para que la exlideresa del SNTE cumpla su prisión domiciliaria:
> Penthouse en el número 7 de la calle Galileo, en la colonia Polanco de la Ciudad de México, con un valor catastral de 7 millones de pesos.
> Casa marcada con el número 30 en la calle Dickens, también en Polanco.
> Residencia en la calle Bosques de Caobas número 75, de la colonia Bosques de Reforma.
> Residencia marcada con el número 501 de la calle de Ahuehuetes, también en Bosques de Reforma.
> Casa ubicada en el número 90 de la calle Edgar Allan Poe, en la colonia Polanco, y otra adjunta en el número 86 de la misma dirección.
> Dos viviendas en la ciudad de Puebla, en las exclusivas zonas residenciales de Lomas de Angelópolis y Club de Golf Las Fuentes, ambas con jardines, área de juegos, salón de recepciones y piscina.