Sistema de cuidados en la CDMX, derecho constitucional olvidado por el Congreso local

En la recta final del último año de la Segunda Legislatura del Congreso de la Ciudad de México (CDMX), los pendientes por atender se acumulan; entre ellos, la aprobación de la Ley Integral del Sistema de Cuidados, propuesta en septiembre de 2023.

El proyecto de decreto presentado ante el Pleno del Legislativo por el diputado Royfid Torres González, adscrito a la Asociación Parlamentaria Ciudadana, contempla 53 artículos y busca garantizar el derecho de las personas a cuidarse, cuidar y ser cuidadas, de acuerdo con lo que establece la Constitución Política de la CDMX.

No obstante, la falta de consenso entre las bancadas ha limitado el avance de este y otros temas relevantes para la ciudadanía.

“Yo creo que es un asunto de voluntad como lo hemos visto en otros temas, como en el del agua, donde llevamos proponiendo dos años atender este tema y no es hasta que tenemos una crisis como la que estamos viviendo o el Gobierno plantea atender el tema con alguna propuesta, que la mayoría del Congreso asume atenderlo”, declara Torres Gonzáles en entrevista con Reporte Índigo.

¿Qué dice la Constitución?

“Toda persona tiene derecho al cuidado que sustente su vida y le otorgue los elementos materiales y simbólicos para vivir en sociedad a lo largo de toda su vida. Las autoridades establecerán un sistema de cuidados que preste servicios públicos universales, accesibles, pertinentes, suficientes y de calidad y desarrolle políticas públicas”, indica el artículo 9, fracción B, de la Constitución capitalina sobre el “Derecho al cuidado”.

El documento especifica que el sistema atenderá de manera prioritaria a las personas en situación de dependencia por enfermedad, discapacidad, ciclo vital, especialmente la infancia y la vejez y a quienes, de manera no remunerada, están a cargo de su cuidado.

Al respecto, la iniciativa turnada a la Comisión de Derechos Humanos del Congreso indica que los cuidados se traducen en las acciones básicas que se realizan en la cotidianidad y se orientan al autocuidado o a satisfacer las necesidades de otras personas a partir de actividades humanitarias.

“Tanto realizar tareas de cuidados como recibirlos es un proceso que ha aumentado y se ha intensificado en los últimos diez años, transformándose, incluso, en una actividad política. En México, la provisión de cuidados es una tarea que recae desproporcionadamente en las mujeres; además de ser de poca accesibilidad y baja calidad, debido a que existen iniciativas aisladas, parciales e insuficientes resultando en un obstáculo para la autonomía personal”, detalla la propuesta legislativa.

Por lo anterior, resalta que la instauración de un Sistema Integral de Cuidados para la capital del país, tiene como objeto principal responsabilizar al Estado de garantizar el acceso al cuidado de todas las personas y distribuirlo equitativamente, además de generar condiciones laborales óptimas para las personas cuidadoras.

El reparto inequitativo de las labores

Los resultados de la “Encuesta Nacional para el Sistema de Cuidados” (ENSANIC, 2022) del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) revela que 77.8 por ciento de los hogares en México cuentan con personas susceptibles a recibir cuidados, es decir, personas con discapacidad y/o dependencia por algún problema o condición mental, menores de edad de cero a cinco años, niñas, niños y adolescentes de seis a 17 años, y personas de 60 años y más.

La ENSANIC precisa que solo el 3.3 por ciento de las personas con discapacidad en el país sí asiste a un centro de cuidados, contrario al 96.7 por ciento de la población que no acude a este tipo de instituciones.

Añade que, de los 28.3 millones de personas de 15 años y más que brindan cuidados, 75.1 por ciento corresponde a las mujeres y 24.9 por ciento a los hombres.

En este sentido, la “Encuesta Nacional sobre el Uso del Tiempo” (ENUT, 2019) realizada por el Instituto de las Mujeres y el INEGI, y que tiene entre sus objetivos conocer la participación y el tiempo asignado al cuidado de personas dependientes, indica que las población en México destina, en suma 31 horas a la semana en tareas de cuidados directos y cuidados pasivos.

Los cuidados pasivos se definen como la actividad de cuidado simultánea o secundaria en que se está al pendiente o al cuidado de otra persona mientras se realiza otra actividad (principal).

De esa medición destaca que las mujeres realizan tareas de cuidados pasivos 28.8 horas a la semana y 12.3 horas de cuidados directos; mientras que los hombres destinan menos de la mitad de ese tiempo a labores con cuidados pasivos, con un total de 12.9 horas a la semana y únicamente 5.4 horas a cuidados directos.

La relevancia del Sistema de Cuidados

“El Sistema de Cuidados es fundamental, primero, para generar una mayor equidad, porque ya sabemos que estas labores recaen, en gran medida, en las mujeres, pero también somos una población que se está haciendo adulta y en algún momento vamos a necesitar ser cuidados y tenemos que ir previendo esta circunstancia para la población en general.

“No es un asunto únicamente de apoyos, es un sistema que garantice que quien se dedique a esta actividad o quien lo requiere tenga las condiciones necesarias para hacerlo o para recibirlo”, afirma Royfid Torres.

Asimismo, adelanta que, en el periodo ordinario de sesiones que inició en 2024, insistirá, junto con la asociación parlamentaria de la que es parte, en promover la aprobación de la propuesta que realizó en 2023.

“Vamos a buscar todas las vías, incluso jurisdiccionales, para obligar al Congreso a que discuta este tema. Definitivamente Morena es quien no avanza con este pendiente, ellos tienen la mayoría y pueden proponer el tema y manejar la agenda, pero ha sido de las dificultades más grandes”, concluye.