Desde el 7 marzo de 2022 que el Sistema Local Anticorrupción (SLA) en la Ciudad de México no tiene rumbo.
En esa fecha, Édgar Téllez Padrón concluyó su cargo como presidente del Comité de Participación Ciudadana (CPC) y como presidente del Órgano de Gobierno de la Secretaría Ejecutiva del SLA, por lo que el órgano quedó acéfalo.
A ocho meses de esa salida, el organismo sigue sin un titular con nombramiento y se desconoce la situación por la que la Comisión de Selección del CPC, entidad que debe llevar a cabo el proceso de selección, no ha emitido las convocatorias.
Ante esto, exmiembros del SLA señalan que el ente está en riesgo y que probablemente para 2023 desaparezca.
Lo anterior se suma a un historial de retrasos, problemas legales y de recursos que ha enfrentado el combate a la corrupción a nivel local.
La nueva crisis
Édgar Téllez Padrón dejó la titularidad del Comité de Participación Ciudadana y del Sistema Local Anticorrupción después de concluir su gestión de un año al frente de la entidad.
La Ley del Sistema Local Anticorrupción señala que la Comisión de Selección debe realizar una convocatoria, 60 días antes de que uno de los integrantes del CPC deje su cargo, para elegir a su sucesor.
Sin embargo, en el caso de Téllez Padrón no sucedió así y, ni previamente ni posterior al término de su encargo, la comisión publicó algún anuncio.
La Ley del SLA detalla que si la comisión no realiza el nombramiento del presidente, los integrantes del CPC deben ocupar el cargo de manera provisional y rotativa durante un lapso de dos meses.
De acuerdo con el portal electrónico del SLA, la primera en asumir el cargo como presidenta del órgano y del sistema fue Ilian Maldonado Salazar; después fue Edwin Cuitláhuac Ramírez Díaz y, por orden, siguió Jorge Alberto Vázquez Segura.
“De presentarse la ausencia temporal del representante, el Comité de Participación Ciudadana nombrará de entre sus miembros a quien deba sustituirlo durante el tiempo de su ausencia. Esta suplencia no podrá ser mayor a dos meses. En caso de que la ausencia sea mayor, ocupará su lugar por un periodo máximo de dos meses el miembro al cual le correspondería el periodo anual siguiente y así sucesivamente”, estipula el marco legal.
Sistema Anticorrupción mutilado
La ausencia de Édgar Téllez Padrón no es la única dentro del SLA: en 2021 dimitió Hilda Nucci González como integrante debido a la falta de recursos que enfrenta el ente.
A pesar de su renuncia, la Comisión de Selección no realizó ninguna convocatoria para elegir a un nuevo integrante, por lo que el CPC solo opera con tres de los cinco integrantes que debe tener.
La entidad encargada de seleccionar los relevos necesarios no tiene portal electrónico ni número de teléfono o correo electrónico para contactarlos. Solo existe una cuenta de Twitter cuya última publicación es sobre el nombramiento de los integrantes del SLA, en marzo de 2021.
Las implicaciones
No existe certeza de por qué la Comisión de Selección no ha llevado a cabo los procesos para nombrar a los nuevos integrantes del CPC, dice Édgar Téllez Padrón en entrevista para Reporte Índigo.
“Desde que era presidente no se sabía por qué no hizo las convocatorias. Lo que podría proceder es que la Comisión de Transparencia y Combate a la Corrupción del Congreso de la Ciudad de México mande a llamar al presidente de la comisión, porque desde febrero tenía que estar nombrada la persona que me iba a suceder en el cargo”, comenta.
Sin embargo, dice el también aspirante a consejero del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), la inactividad de la comisión pone en riesgo al SLA.
“El presidente del CPC, preside el SLA y la importancia de que exista es que el Sistema Nacional Anticorrupción no opera sin los sistemas locales y, sin ellos, es muy difícil que se pueda instalar”, declara.
Asimismo, afirma que en la capital del país no existe un combate a la corrupción, pues el Comité de Participación Ciudadana es el órgano que coordina las políticas para erradicar y sancionar dicho problema a nivel local, y está incompleto.
Explica que el SLA está en riesgo porque, sin integrantes nuevos y sin recursos financieros, no podrá subsistir.
“Si uno de los tres integrantes que están en funciones renuncia, ya sea porque no hay recursos o por otro motivo, el SLA deja de funcionar, porque la ley marca que todas las decisiones dentro del CPC se toman de manera democrática y que además de secretario técnico y presidente debe haber un integrante y, si solo quedan dos personas, se paraliza”, detalla.
Por lo anterior, Téllez Padrón evalúa complicada la continuidad del SLA para los siguientes años: “Veo muy difícil que pueda soportar, es muy complicado ser parte del SLA porque, legalmente, son cargos honoríficos y no se recibe un sueldo, pero tampoco se le etiquetan recursos para gastos operativos”.
El mismo portal electrónico del CPC detalla la problemática del presupuesto que enfrentan en el órgano.
“Los integrantes del CPC de la CDMX no tienen ingreso asignado hasta el día de hoy y han tenido que actuar con recursos propios, cualquier cambio se hará del conocimiento, por lo anterior, no cuentan con los contratos de honorarios ni con domicilio para recibir correspondencia, el Órgano de Gobierno deberá de cumplir lo establecido en el artículo 17 del Sistema Local Anticorrupción”, precisa.
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