El pánico por la pandemia del Covid-19 se ha manifestado de diferentes formas en todo el mundo.
Una de ellas, la cual incluso ya comenzó a generar un problema alterno para el sistema de salud en muchos países, incluido México, es el consumo de medicamentos sin prescripción médica.
La desinformación, las noticias falsas, la falta de capacidad de los gobiernos para administrar pruebas para el virus y el pánico de caer víctimas de la enfermedad, ha llevado a miles de personas a no solo consumir fármacos creados para curar otros padecimientos, sino a comprarlos en grandes cantidades, provocando un desabasto para las personas que sí requieren de las medicinas.
“La automedicación siempre ha sido un problema. Y en un contexto como el de México, donde las medicinas las puedes conseguir de manera muy fácil, es común que las personas las consuman sin consultar a un especialista de la salud previamente. Lo que a su vez trae consigo otros problemas.
“Si la gente empieza a sufrir de fallas hepáticas o cualquier otro padecimiento por usar un medicamento de manera inadecuada, se le imprime más carga a un sistema de salud de por sí saturado, entonces se corre el riesgo de que colapse, sobre todos en momentos como este”, explica en una entrevista para Reporte Indigo el psiquiatra Pablo J. Chalita, quien dice que ya ha sido consultado por algunos de sus pacientes sobre la posibilidad de comprar y consumir algunos de los medicamentos que se están probando para combatir el Covid-19 en caso de presentar algún síntoma.
Ante esta realidad, el doctor asegura que la información que se ha difundido sobre algunos medicamentos que parecen resultar efectivos contra el virus que ha provocado una pandemia mundial, no se debe generalizar ni tomar como algo que ya es seguro, ya que todos estos estudios están en fase de investigación.
“Podrías terminar hospitalizado por algo que ni te iba a pasar y te provocaste por el pánico. El miedo te hace actuar de manera irracional. Tiene que ver con la muerte.
“Sin embargo, en este caso no podemos reaccionar como lo haríamos de manera normal ante un peligro: peleando o huyendo, entonces como la herramienta que las personas tenemos a la mano para combatir enfermedades son las medicinas, como es el arma que está a mi alcance para pelear contra el virus, pues quienes sucumben ante la paranoia buscan usarlas para defenderse aunque sea de manera equivocada”, explica el psiquiatra.
Pánico cobra víctimas
En Arizona, Estados Unidos, se reportó el lunes pasado que un hombre falleció mientras que su esposa se encuentra en estado crítico tras haber consumido fosfato de cloroquina en un intento por protegerse del coronavirus.
La idea la sacaron después de que el presidente norteamericano Donald Trump anunciara de manera equivocada que la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) había aprobado el uso de la cloroquina y de la hidroxicloroquina para tratar el Covid-19.
En México, en redes sociales se puede ver a personas enfermas de Lupus que han denunciado la falta del medicamento conocido como Plaquenil (hidroxicloroquina) ante las compras de pánico efectuadas por miles de ciudadanos después de que diversos medios de información dieron a conocer que este fármaco podría ayudar a combatir el Covid-19.
Medicamentos a prueba
El viernes pasado, la Organización Mundial de la Salud (OMS) anunció la creación de un ensayo conjunto entre varias naciones para probar diferentes medicamentos que podrían ayudar a hacer frente al coronavirus.
De acuerdo a la información ofrecida por la OMS, en este nuevo esfuerzo llamado Ensayo de la Solidaridad, participan por el momento Argentina, Bahréin, Canadá, Francia, Irán, Noruega, Sudáfrica, España, Suiza y Tailandia. No obstante se espera que cada vez sean más naciones las que se unan a la investigación para encontrar un tratamiento contra el virus.
Actualmente son cinco medicamentos y tres combinaciones entre los mismos los que se están estudiando principalmente.
El primero de ellos y con el cual ya se han realizado 10 protocolos de investigación en Alemania es el Lopinavir en combinación con el Ritonavir, utilizados para tratar la infección por VIH.
Con cinco protocolos efectuados también se ha estudiado el Remdesivir, el cual inhibe la ARN viral y ayuda a evitar que los virus se multipliquen.
La Cloroquina es una de las más populares ya que cuenta con 18 protocolos aplicados.
El Interferón también se encuentra en la mira, el cual originalmente fue creado para limitar la replicación viral.
Por su parte, el Arbidol, también ha sido sometido a pruebas, sin embargo aún se desconoce su efectividad.
Entre los resultados más prometedores actualmente derivados de estos estudios se encuentra el uso combinado de Hidroxicloroquina más Azitromicina.
De acuerdo con el estudio realizado en Francia, donde se probaron estos medicamentos, al usar solo la Hidroxicloroquina en pacientes con Covid-19 en un estado no grave, ocho de 14 se curaron, mientras que al usar los dos fármacos combinados seis de seis pacientes superaron el virus.