El historiador Carlos Silva señala que el fortalecimiento de los contrapesos del Poder Ejecutivo federal, como lo son los poderes Legislativo y Judicial, es necesario para quitar el embrujo del que es presa el poder presidencial. Foto: Especial

¿La silla presidencial está embrujada? Carlos SIlva y Alejandro Rosas recorren 200 años hasta el origen de esa historia

En el marco de una sucesión sin precedentes que desembocará en la llegada de una mujer a la Presidencia de México, el libro ‘La silla embrujada’ muestra los relevos presidenciales de los últimos dos siglos

La historia de la sucesión presidencial es al mismo tiempo la historia larga y tortuosa de la democracia mexicana y es el espejo donde se refleja la titánica tarea de lograr que de una vez por todas México se convierta en un país respetuoso de las leyes y de las instituciones, manifiestan el historiador Carlos Silva y el investigador Alejandro Rosas al inicio de La silla embrujada. La truculenta historia de la sucesión presidencial, una aportación historiográfica que repasa 200 años de relevos en el poder.

En el marco del periodo de transición política que dejó el proceso electoral 2023-2024, la obra editada por Grijalbo se erige como un faro para entender la evolución de los procesos democráticos en el país hasta la actualidad, en donde la población mexicana se encuentra en la antesala del primer gobierno federal encabezado por una mujer.

“La democracia, como tal, sigue funcionando muy bien. Votaron ¿qué te gusta?, ¿45 millones de personas? Y eso es muy bueno para el país. Los ciudadanos que participaron en el INE (Instituto Nacional Electoral) y que calificaron la elección vuelven a demostrar que es una institución indispensable, que funciona, que tienen que fortalecerla y seguirla consolidando, ya las preferencias y por quién votaron es de cada quien”, menciona Carlos Silva, doctor en Historia por la Universidad Nacional Autónoma de México en entrevista con Reporte Índigo.

Referencia bibliográfica, el objetivo de la publicación

Tras repasar los acontecimientos que dieron forma y cauce a su amistad con Alejandro Rosas, con quien colabora editorialmente por primera vez, Silva explica que la idea de crear la publicación recién lanzada surgió entre charlas de comidas, tragos y sobremesas con la intención de volverla un referente bibliográfico para las futuras generaciones.

“Le decía a Alejandro, ‘tenemos que aprovechar que nos dedicamos al siglo XX para explicar la historia política contemporánea a través de los procesos electorales’, porque siempre estamos opinando, diciendo, y nos hemos dado cuenta, con este ejercicio que hicimos, que nos convertimos en todólogos, en opinadores, pero ya hacer historia es una cosa muy seria, responsable, hay que utilizar fuentes, referencias bibliográficas, historiográficas, de primera mano.

“Era padre porque, aunque no nos sentábamos juntos, como compañeros de escuela en el mismo pupitre, nos hablábamos, pedíamos nuestra opinión y nunca perdió esta espontaneidad de sentarnos a tomar un cafecito, de ir a comer, de desayunar, de cenar o de echar un whisky y fumarnos un buen puro”, recuerda.

De este modo, entretejido con los estilos de ambos autores, el libro aborda la diversidad de anécdotas que rodean a la codiciada silla presidencial desde principios del siglo XX y hasta la fecha, cuyo poder está en manos de Andrés López Obrador, fundador del Movimiento Regeneración Nacional al que pertenece Claudia Sheinbaum Pardo, virtual presidenta electa de México.

Pancho Villa no lo pensó dos veces, se acomodó en ella ‘solo para ver qué se siente’ y se fotografió muy sonriente, acompañado por (Emiliano) Zapata y varios de sus generales. Luego se levantó y le dijo al caudillo suriano que era su turno, pero Zapata se negó tajantemente y dijo ‘La silla presidencial está embrujada. Cualquier persona buena que se siente en ella se convierte en mala. Deberíamos quemarla’”, se lee en la página 11 de la obra.

Fortalecimiento de la democracia, antídoto contra el embrujo

El historiador Carlos Silva señala que el fortalecimiento de los contrapesos del Poder Ejecutivo federal, como lo son los poderes Legislativo y Judicial, es necesario para quitar el embrujo del que es presa el poder presidencial, toda vez que quien dirija los destinos de la nación debe tener límites en el ejercicio de su cargo.

“A través de marcos jurídicos más fuertes y operantes que tengan límites que acoten el poder presidencial”, manifiesta.

No obstante que el Poder Soberano y su división deben perfeccionarse y ajustarse a los requerimientos de la vida actual, el especialista asegura que la democracia en el territorio nacional va por buen camino y México está lejos de desmoronarse y convertirse en una dictadura.

“México tiene instituciones muy robustas, muy fuertes y es muy difícil que le suceda algo al país, hay que fortalecer lo que tenemos y mirar hacia atrás para no cometer nuestros mismos errores”, comenta.

Participación de las mujeres en la política, al alza

Durante 200 años, personajes de distinta índole han ocupado la Presidencia de la República, pero será hasta 2024 que, por primera vez, una mexicana despache desde la silla presidencial. Al respecto, Silva opina que, independientemente de si se es hombre o mujer, se requiere que la persona que esté a cargo del Gobierno federal tenga la capacidad de resolver los problemas del país con visión de estadista y no como político.

“Que vean a futuro, no a seis años, que vean a 20-30 años un proyecto político y que dejen las estructuras para hacerlo. Ahora bien, estamos viviendo un momento muy importante en cuanto a la participación de las mujeres en el mundo, no es privativo de México, entonces hay que ver que la virtual presidenta responda a las expectativas de todas las mujeres que han confiado en ella y que se sientan representadas por ella, porque, hasta el momento, en esta administración ha sido un asunto cuestionado y fallido”, puntualiza.

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