La condena que pagan 38 personas privadas de la libertad en penales de Nuevo León no fue impedimento para decidir unir sus vidas en matrimonio y este martes el Gobierno les organizó una boda colectiva al interior del Centro de Reinserción Social de Apodaca.
Los reos y sus parejas tuvieron la oportunidad de formalizar su relación ante la ley y ahora con el “Sí, acepto” se comprometen a cumplir con las normas civiles del matrimonio.
La Agencia de Administración Penitenciaria, en conjunto con el Gobierno y la asociación Vicentinas, llevaron a cabo la ceremonia en donde estuvieron como invitados los familiares de los reos, como sus hijos, madres o padres.
Disfrutan de su boda
Tras llevar a cabo todo el trámite donde las parejas firmaron su acta, se llevó a cabo el tradicional vals y degustaron de un banquete que consistió en asado de boda, al interior de las instalaciones.
Uno de los momentos más emotivos fue cuando sonó la canción principal para el vals que estuvo a cargo de “Cielo” que la interpreta cantante mexicano Benny Ibarra.
El patio del penal fue decorado con detalles típicos que se acostumbran a colocar en los eventos sociales como mesas con manteles blancos, arreglos florales y hasta música para que las parejas disfrutaran de este día.
A la unión de parejas también participó el Registro Civil para hacer acto legal del casamiento y llevar a cabo el procedimiento correspondiente.
Además de la ceremonia civil, las autoridades entregaron 14 reconocimientos de paternidad que estaban pendientes, luego de llevar a cabo los estudios correspondientes.
El evento estuvo rodeado de diversos funcionarios estatales como Dulce Mora de la subsecretaría de Protección Social y Oportunidades de Igualdad e Inclusión, así como de Graciela Buchanan, de la Secretaría de las Mujeres, entre otros.