Jalisco se ha convertido en una de las entidades más violentas del país. Los atracos con uso de violencia reflejan el incremento en el uso de armas de fuego para cometer los delitos, como lo reflejan las cifras del Secretariado Ejecutivo de Seguridad Pública.
En los primeros cinco meses de este año se han denunciado alrededor de 2 mil 179 robos de autos con uso de violencia. Llama la atención que esta modalidad supera al robo que se ejerce sin hacer uso de violencia, lo que se comparte con otras entidades, como el Estado de México, Guerrero y Sinaloa.
Según el Índice de Paz, Jalisco se encuentra en la posición 18 de los 32 estados de la república en términos de paz. Esta posición ha empeorado para la entidad por el impacto que tienen las cifras de homicidios o el uso de armas de fuego durante el 2016.
“La tasa de homicidios para Jalisco en 2016 es de 14 por cada cien mil habitantes, lo que vemos a través del índice global de paz es que la tasa de homicidios promedio a nivel global es de 7 por cada 100 mil habitantes. Por lo tanto, cuando en México hablamos de tasas de entre 14 y 16 estamos todavía a más del doble que el promedio global”, lamentó Patricia de Obeso, coordinadora del Institute for Economics and Peace en México.
Tan sólo en Guadalajara, en los últimos tres años el número de personas que dijeron haber sido victimas de algún delito incrementó un 10 por ciento.
Números del mismo Secretariado Ejecutivo muestran que de enero a mayo de 2017 han incrementado los robos a casa y robo a negocio, tan sólo en los nueve municipios de la Zona Metropolitana de Guadalajara.
De acuerdo con datos de mayo pasado, cerca del 21 por ciento de la población tapatía, una de cada cinco personas, dijo haber padecido algún incidente con respecto a la inseguridad que se vive en la metrópoli.
Esto ha llevado a que la población tome justicia por su propia mano, ante la falta de acción por parte de las autoridades de seguridad. Apenas el pasado martes, se registró la detención ciudadana de un presunto ladrón que, con arma de fuego, intentó asaltar a una mujer en el sector Libertad del municipio de Guadalajara.
El presunto ladrón fue golpeado y despojado de su pistola por personas que ayudaron a la mujer cuando era víctima del asaltante; un ciudadano grabó con video cómo el ladrón pedía perdón para que ya no lo lastimaran. La Policía de Guadalajara no ha dado un posicionamiento respecto de estos actos por parte de la población.
Muchos delitos, pocas sentencias
En Jalisco existe un nivel de impunidad muy alto, a decir de los datos contabilizados en la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública.
La entidad se encuentra dentro de una dinámica nacional donde solamente siete de 100 delitos que se cometen llegan a denunciarse, alcanzando una cifra negra muy superior al 90 por ciento.
Sólo el 4.46 por ciento de los delitos que son denunciados llegan a tener una sentencia condenatoria, lo que arroja que la impunidad sea de cerca del 99 por ciento, ya que sólo uno de cada 100 delitos son castigados.
Jalisco comparte su alto grado de impunidad con otras entidades como Sinaloa, Zacatecas, Morelos, Puebla, Tabasco, Colima, entre otros.
Tal impunidad es el reflejo de un problema que tienen las entidades con respecto a la gobernanza, que rebasa a las instancias de gobierno.
A inicios de este mes fue presentada la Agencia Metropolitana de Seguridad, cuya operación ya se había echado a andar desde noviembre pasado, pero ahora se hizo bajo un programa general de trabajo.
La agencia, integrada en su Junta de Gobierno por los alcaldes metropolitanos y el gobernador de Jalisco, pretende arrancar durante el tercer trimestre de este 2017 algunas acciones, entre ellas, desarrollar diagnósticos y políticas de violencia situacional y seguridad urbana
Además de analizar y evaluar las políticas públicas instrumentadas de manera coordinada por los municipios metropolitanos, y desarrollar estudios, recomendaciones y propuestas relacionadas con Ciudades y Espacios Públicos Seguros y el programa Ciudades Seguras Libres de Violencia.
Reflejan hartazgo
Reporte Indigo publicó en marzo pasado que algunos grupos ciudadanos han sugerido formar autodefensas en la ciudad ante las altas cifras en los delitos e impunidad.
Alto costo de impunidad
Este ambiente de inseguridad y la idea generalizada de que las autoridades no están cumpliendo con su función ejecutiva para atacar el problema de la inseguridad en su sentir inmediato tiene dos consecuencias:
Una es el incremento en la percepción de que Jalisco no es seguro y la otra es que la inseguridad representa un alto costo económico.
En el primer caso, la población tapatía pasó de considerar como muy insegura a la metrópoli de 42 por ciento en 2014 a 60 por ciento en 2016.
A esto se suma la insatisfacción por parte de la población, que dice ya no confiar en las acciones de las autoridades y sus políticas públicas en general, pues en una escala de uno a siete, la gente dice que su satisfacción con respecto a la seguridad es de apenas 3.2, según Jalisco Cómo Vamos.
Por otro lado, datos proporcionados por académicos del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Occidente (ITESO), revelan que a Jalisco le costó 179 mil millones de pesos la inseguridad en 2016. Un 15 por ciento del Producto Interno Bruto de la entidad.
Es decir, que la inseguridad le cuesta a cada jalisciense alrededor de 22 mil 400 pesos.
Este gasto incluye lo erogado por el gobierno para la protección de los ciudadanos y a los mismos gobiernos.
Entre delitos y desconfianza
Datos de autoridades y organismos reflejan la percepción ciudadana sobre el tema de seguridad:
>> 21
Por ciento de la población tapatía dijo haber padecido algún incidente de inseguridad
>> 4.46
Por ciento de los delitos denunciados llegan a tener una sentencia condenatoria
>> 1 de 5
Personas habrían sido víctimas recientemente de algún hecho delictivo
>> 60
Por ciento de la población consideró muy insegura a la metrópoli en 2016
>> 42
Por ciento de la población opinó en 2014 que la metrópoli era muy insegura