Después de cancelarse el Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM), el secretario de Comunicaciones y Transportes, Javier Jiménez Espriú, explicó que el material sobrante de esta obra, que se pretendía realizar en Texcoco, se podría utilizar para la construcción del Tren Maya.
De acuerdo con Espriú, el acero, tezontle y basalto que sobró, y que ya no se utilizará para el NAIM, se venderá y lo comprarán los clientes del aeropuerto de Santa Lucía, lo que significaría un ahorro y la reutilización del propio material.
Agregó que se trata de 40 mil toneladas de tezontle y de basalto que también se pueden utilizar para la cimentación del aeropuerto de Santa Lucía, para el tren del Istmo de Tehuantepec o el Tren Maya.
Al término de su participación en el foro de aviación organizado por la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA, por sus siglas en inglés), indicó que la logística para la operación simultánea de los aeropuertos de la Ciudad de México, la nueva terminal de Santa Lucía y el de Toluca será analizada con las aerolíneas.
Luego de reunirse con el director general de la IATA, Alexandre de Juniac, reconoció que operar en tres aeropuertos es complicado para las aerolíneas, por ello se dialogará para encontrar soluciones.
Respecto al hangar presidencial ubicado en el actual Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), Jiménez Espriú dijo que para la remodelación de la terminal capitalina se va a quitar, lo van a desarmar “y lo vamos a rearmar en otra parte, tal vez para uso de la Defensa Nacional”.
“Ahí vamos a construir una terminal y posiciones para ampliar las capacidades del aeropuerto”, concluyó el titular de la SCT.