El presidente de la República Andrés Manuel López Obrador después de un sábado lleno de festejos, comenzó a trabajar ayer desde temprano.
Por la mañana, el mandatario encabezó la salutación de las Fuerzas Armadas en la Ciudad de México y por la tarde-noche visitó en Xalapa al nuevo gobernador de Veracruz, el morenista Cuitláhuac García.
Desde la plaza central de la ciudad veracruzana, López Obrador prometió que haría de México una potencia.
“Gracias a que no pudieron saquear por completo al país, con lo que dejaron se puede hacer de México una potencia”, dijo el tabasqueño.
Durante su discurso, López Obrador confió en que tanto el país como Veracruz comenzarían una nueva etapa: la Cuarta Transformación.
“Que bueno, fue como una bendición que también se ganara la gubernatura en Veracruz, vamos a poder trabajar juntos. Imagínense, ¡Ay nanita!, no estaría yo aquí, que viva el pueblo de Veracruz”, dijo el morenista.
Para llegar a Xalapa, López Obrador realizó su primer vuelo comercial del sexenio, cumpliendo la promesa de campaña de no utilizar el avión presidencial por “ostentoso”.
Antes de abordar, AMLO respondió preguntas a los medios de comunicación en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de Mexico, saludó a simpatizantes, firmó un par de autógrafos y posó con varias personas que le pidieron una fotografía.