Olga Sánchez Cordero, titular de la Secretaría de Gobernación (Segob), conversó con Rosibel Arriaza, madre de Victoria Esperanza Salazar, la mujer salvadoreña asesinada por policías en Tulum, para ofrecerle el apoyo del Estado mexicano.
Durante una conversación telefónica, Sánchez Cordero ofreció sumar esfuerzos para la atención integral de la familia de Victoria Salazar.
Hace un rato a través de la titular de @CONAVIM_mx, hablé telefónicamente con la Sra. Rosibel Arriaza, madre de Victoria Salazar, a quien le ofrecí todo el apoyo del Estado mexicano. https://t.co/3nQsPn3jNj
— Olga Sánchez Cordero (@M_OlgaSCordero) April 1, 2021
En una reunión con autoridades de Quintana Roo, la titular de la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres (Conavim), Fabiola Alanís, informó que la dependencia a su cargo está atendiendo y dandole seguimiento al caso.
La Conavim, además trabaja coordinadamente con la subsecretaría de Derechos Humanos, Población y Migración a cargo de Alejandro Encinas.
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A la reunión en la que se habló con la familia de Victoria Salazar también acudieron el secretario de Gobierno de la entidad, Arturo Contreras; el encargado del despacho de la Secretaría de Seguridad Pública estatal, Lucio Hernández Gutiérrez; Silvia Damian López, directora del Instituto de las Mujeres; y Karla Rivero, comisionada de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas del Estado de Quintana Roo.
Esta mañana la secretaria de Gobernación, @M_OlgaSCordero, ofreció sumar esfuerzos para la atención integral de la familia de Victoria Salazar. Vía telefónica, se comunicó con la Sra. Rosibel Arriaza, madre de la víctima de origen salvadoreño. 1/3 pic.twitter.com/W1aTGgfoqw
— Gobernación (@SEGOB_mx) April 1, 2021
Victoria Esperanza Salazar Arriaza, una migrante salvadoreña, fue asesinada el pasado 27 de marzo por policías de Tulum, Quintana Roo, quienes la sometieron y detuvieron con uso excesivo de la fuerza.
Por la mañana, Rosibel Arraiza, madre de Victoria Esperanza, pidió al presidente de Estados Unidos, Joe Biden, refugio para sus dos nietas, hijas de la víctima.
Arraiza argumentó que sus dos nietas quedaron desamparados después del asesinato de su hija y confesó tener temor de que queden desprovistas en un país como México, que al igual que El Salvador no son seguros para ellas.
“Yo tengo temor que a mis niñas les suceda algo en México y tampoco quiero traerlas a El Salvador. Quiero pedirle al presidente (Joe) Biden que me ayude, me tienda la mano y les dé refugio a mis nietas en Estados Unidos”, declaró.
