La violencia no respeta credos y los homicidios con violencia contra sacerdotes han ido en aumento. De 1990 a 2015, 55 sacerdotes han sido asesinados en México, 14 de ellos, en los últimos cuatro años.
México es considerado uno de los países más peligrosos no solo para profesiones como la de los periodistas, sino también para los sacerdotes.
Según un informe del Centro Católico Multimedial, una plataforma de comunicación religiosa, México es uno de los países más peligroso para ejercer la libertad de culto, pues en lo que va del año se han registrado 18 agresiones en contra de líderes religiosos.
Reporte Índigo confirmó cada caso con versiones periodísticas de medios nacionales y locales.
El Departamento de Estados Unidos retomó el informe del Centro en el documento “México: Informe de 2015 sobre la libertad de culto”, publicado el pasado 15 de septiembre.
“Los sacerdotes y otros líderes religiosos en algunas partes del país continuaron siendo blanco y recibieron intentos de extorsión, amenazas de muerte e intimidación, a menudo de grupos delictivos”, precisó la dependencia estadounidense.
Las entidades más peligrosas para ejercer la libertad de culto son Veracruz, el Estado de México y Guerrero, de acuerdo al informe estadounidense con datos del Centro.
La organización religiosa ha denunciado que varios sacerdotes se encuentran desparecidos, por lo que el número de muertes podría ser mayor.
Los homicidios en contra de líderes religiosos ha aumentado en un 275 por ciento de 1990 a 2015, indica el registro del Centro.
Lista de líderes religiosos asesinados (2012-2016)
Fuente: Informe del Centro Católico Multimedial
Víctor Manuel Diosdao, Apatzingán, Michoacán
Fue asesinado en junio de 2012. La Diócesis de Apatzingán señaló que su trabajo pastoral incomodó al crimen organizado.
José Flores, Colima, Colima
En febrero de 2013, un grupo de personas entró a robar el templo de Cristo Rey e hirieron al clérigo, quien murió en el hospital.
Ignacio Cortez, Ensenada, Baja California
Asesinado el 22 de julio de 2013, la Procuraduría General de la República informó que el padre murió durante un robo con violencia.
Hipólito Villalobos y Nicolás de la Cruz, Ixhuatlán de madero Veracruz
Fueron encontrados sin vida en noviembre de 2013 a las afueras de la Parroquia de San Cristóbal, en el municipio de Ixhuatlán de Madero, zona controlada por grupos de la delincuencia organizada.
John Ssenyodo, Chilpancingo, Guerrero
Proveniente de Uganda, el misionero fue asesinado en octubre de 2014. El religioso había llamado a los habitantes de Chilpancingo a no rendirse ante los criminales.
José Ascención, Cocula, Guerrero
Secuestrado y asesinado en septiembre de 2014, fue encontrado un mes después en una fosa clandestina en Cocula, Guerrero.
Rolando Martínez, Jilotepec, Estado de México
Fue asesinado durante el robo al templo de Santa María de Guadalupe en febrero de 2014.
Gregorio López, Ciudad Altamirano, Guerrero
Recibió un disparo en la frente, pero al quedar con vida, lo asfixiaron hasta matarlo en diciembre de 2014.
Francisco Gutiérrez, Salvatierra, Guanajuato
Fue encontrado con varios impactos de bala en la cabeza en un camino de terracería en los límites del municipio de Salvatierra en abril de 2015.
Israel Garrido, Cuatitlán Izcalli, Estado de México
Asesinado en noviembre de 2015, el hombre recibió cinco disparos durante un asalto.
Alejo Jímenez y José Juárez, Poza Rica, Veracruz
Fueron encontrados sin vida el pasado lunes 19 de septiembre en la carretera Poza Rica-Papantla, los clérigos tenían varios impactos de bala, incluso en el rostro.
En 2015, 520 sacerdotes del país sufrieron extorsiones por parte del crimen organizado, señala el informe del Centro.
En el gobierno de Carlos Salinas (1988-1994) hubo un solo homicidio de un sacerdote; en el periodo de Ernesto Zedillo (1994-2000) se cometieron tres, y en el de Vicente Fox (2000-2006) fueron cuatro.
Hubo 12 sacerdotes asesinados en el gobierno de Felipe Calderón (2006-2012) y en lo que va de la actual administración (2012-2016) son ya 14 las víctimas.
