RSP: El satélite ¿corrompido?
Redes Sociales Progresistas, la organización que busca obtener su registro como partido político, mantiene liderazgos polémicos: personas cercanas a la exlideresa del SNTE, Elba Esther Gordillo, o a Juan Peña Neder, quien estuvo en prisión, acusado de violación tumultuaria
Imelda GarcíaLas Redes Sociales Progresistas (RSP), la organización con la que Elba Esther Gordillo busca regresar a la escena política del país, se perfila para ser el partido satélite de Morena en las elecciones del 2021.
Y lo hará con liderazgos que han enfrentado situaciones polémicas; incluso, que han estado en prisión o se han visto envueltos en escándalos de corrupción.
Aunque se trata de una agrupación política que fue convocada y conformada en sus inicios por personas cercanas a la exlideresa del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), el proyecto político ha incluido a estos personajes.
El principal es Juan Iván Peña Neder, coordinador nacional de las RSP y uno de los autores del acercamiento con Morena.
Esto contrasta con el discurso de Andrés Manuel López Obrador, figura que las RSP han adoptado incluso en su identidad gráfica, mostrando el rostro del presidente de la República en sus reuniones y carteles.
Así como ocurrió en el 2005 cuando creó el partido Nueva Alianza, Elba Esther Gordillo volverá a echar mano del gremio magisterial para conseguir las 233 mil 945 firmas necesarias para llevar a RSP a convertirse en un nuevo partido político, que promete ser el principal aliado del presidente Andrés Manuel López Obrador para la segunda mitad de su sexenio.
La cabeza polémica
La cercanía de Juan Iván Peña Neder y Elba Esther Gordillo quedó patente en las múltiples visitas que él le hizo en el penal donde la exlideresa magisterial purgó su tiempo en la cárcel, en el sexenio de Enrique Peña Nieto.
El coordinador nacional de las Redes Sociales Progresistas tiene un lazo cercano con Gordillo y su familia y fue el artífice del acercamiento de estos con Morena, después del rompimiento de Peña Neder con el movimiento de López Obrador.
En 2006, Juan Iván Peña Neder coordinaba las Redes Ciudadanas de Andrés Manuel López Obrador cuando fue candidato presidencial por primera vez.
Peña Neder estaba encargado de las labores de vigilancia en las casillas para los votos de López Obrador; sin embargo, la derrota electoral derivó en una ruptura de él con el movimiento del político tabasqueño, porque la indicación de Gordillo fue apoyar finalmente a Calderón.
Se incorporó entonces a la Secretaría de Gobernación del gobierno de Felipe Calderón, como coordinador de asesores de Abraham González, subsecretario de Gobernación, desde donde salieron múltiples permisos a empresarios para instalar casinos.
Tras su paso por Gobernación, su exesposa, la abogada Talía Vázquez —quien llevó el caso de José Manuel Mireles— lo acusó del delito de violación tumultuaria, argumentando que varios hombres la obligaron a estar con ellos con el consentimiento de Peña Neder. Dos años después salió de la cárcel.
En octubre del 2013, Reporte Índigo publicó que aunque estaba en prisión, Peña Neder encabezaba una red criminal que traficaba con permisos falsos para casinos, como el que tenía el Casino Royale, en Monterrey, que se quemó en agosto del 2011 y donde fallecieron 52 personas.
Ya en libertad, Peña Neder retomó el vínculo con Gordillo, aun en prisión, y con su familia. La idea fue plantearle una forma de vengarse del PRI y de Enrique Peña Nieto, que la había encarcelado.
El proyecto fue tomando forma cuando convenció a Fernando González y René Fujiwara, yerno y nieto de Elba Esther Gordillo, de conformar un grupo que se acercara a López Obrador y le propusiera cuidar el voto, como en el 2006; con la diferencia de que en 2018, Gordillo sí buscaba el triunfo del tabasqueño.
Tejieron una red de miles de maestros y simpatizantes en todo el país, que cuidaron los votos, mismos que ahora buscan conformar el partido político de Gordillo.
El triunfo de López Obrador les abrió las puertas para ponerse en el camino de ser el principal aliado de Morena para las elecciones intermedias del 2021.
Las caras visibles
Las caras más visibles de las RSP son Fernando González Sánchez, su coordinador nacional de operación política; y René Fujiwara, asesor de González.
Ambos son familiares de Elba Esther Gordillo: González es esposo de su hija, Maricruz Montelongo; y Fujiwara es hijo de René Fujiwara Apodaca, ex esposo de Montelongo.
Desde 2017, la RSP se subió a la ola de apoyo al hoy presidente López Obrador y le granjearon apoyos del magisterio inconforme con la reforma educativa y con la situación en el SNTE.
Utilizando el mismo esquema de conformación del Partido Nueva Alianza, Redes Sociales Progresistas comenzó ya con el camino para convertirse en un partido político nacional.
Para ello ha organizado células en cada uno de los estados, en los que representantes de RSP —maestros, en su mayoría— trabajan en las bases sociales, en colonias y barrios, consiguiendo apoyos para el nuevo partido.
De consolidarse como un partido político, las RSP han marcado una línea: serán acompañantes del presidente, pero no serán incondicionales de Morena.
En su postura han adoptado líneas discursivas de López Obrador, lo que les ha hecho ganar el apoyo de amplias bases del magisterio y sus comunidades.
En la convención donde decidieron solicitar su constitución como nuevo partido, González trazó la ideología del nuevo partido.
Fujiwara ha dejado claro el vínculo de las RSP con el magisterio, lo que casi les garantiza los apoyos necesarios para lograr el registro.
“Los maestros y los miembros de las Redes Sociales Progresistas eran víctimas de una política de acoso y de intimidación; esa era nuestra situación hace no más de un año”, recordó Fujiwara en su convención nacional.