Vecinos de Coyoacán ya no pueden dormir tranquilos debido a la inseguridad que padecen y que se mantiene impune ante la falta de presencia, capacitación y equipamiento de las autoridades.
Los habitantes de la colonia Parque San Andrés han vivido al menos 19 robos a casa habitación en los últimos dos meses, de acuerdo con el registro que les proporcionó la alcaldía.
Uno de los más recientes duró dos horas y ninguna fuerza del orden intervino. Además, la colonia solo cuenta con una sola patrulla y no se da abasto ante la inseguridad, que también se ha derivaron en asaltos a transeúnte.
En 2018, en Coyoacán se registraron 14 mil 568 delitos, cifra superior a la de 2016 de 11 mil 616 delitos, según cifras del Portal de Datos Abiertos de la Ciudad de México
Respecto a los ilícitos, el más cometido en 2016 fue el robo a negocio con violencia con mil 90, mientras que en 2018 fue el robo común de objetos con tres mil 581.
En cuanto al robo a casa habitación, durante 2016 hubo 436 robos y en 2018 la cifra se incrementó a 593.
La familia de Yarel Calderón y Luis Alberto García fue víctima del saqueo de su casa el pasado 4 de junio, el cual tardó dos horas en llevarse a cabo.
Al respecto, las autoridades se dijeron incompetentes y la empresa de seguridad privada ADT, a la que contrataron, se deslindó del hecho.
“Hicimos la denuncia, después de dos días vinieron los peritos, pero cuando llegaron nos dijeron que no podían hacer nada porque la procuraduría no les daba los materiales suficientes para la identificación de huellas.
“Aceptaron que había muchas huellas, en el portón estaba una mano completa y me dijeron ‘las plumas que traemos son viejas, el perito que viene es prestado de Tlalpan y la cámara es vieja’, es triste”, puntualiza Calderón.
La mujer añade que ante el temor de que se vuelvan a meter a robar su casa, prefiere dejar a sus hijos con su madre y tampoco puede estar en su vivienda con tranquilidad.
Hay delincuencia suelta a todo lo que da y uno está de manos cruzadas, no vamos a recuperar nada, el problema es que lejos de robarte todo lo material, te roban tu tranquilidad, yo nada más estoy esperando a que alguien se meta, mis niños no pueden estar aquí porque están chiquitos, me da miedo
Situación que se suma a que la empresa de seguridad les quiere cobrar una penalización por prescindir de sus servicios.
“Queremos cancelar, pero nos quieren cobrar nueve mil pesos por eso, no puede ser posible que aparte de que no hayan hecho su trabajo quieran que les paguemos esa cantidad”, añade.
El monto de lo robado a la familia rebasa los 20 mil pesos, pues se llevaron una pantalla, Ipads, ropa, bolsas, entre otras cosas.
Karem Flores, otra vecina de la colonia, señala que a pesar de que su fraccionamiento tiene seguridad particular, decidió contratar el mismo sistema para su casa.
“Instalamos nuestra propia cámara, aparte de que pagamos vigilante en el condominio donde vivimos pero eso de pagar vigilante y reforzar mi vigilancia particular es un gasto que no deberíamos hacer porque ya pagamos impuestos”, indica.
Flores menciona que los problemas de seguridad se acentuaron en 2016 cuando inició la construcción de una plaza comercial en la esquina de Antigua Tasqueña y Virginia.
“Comenzaron a venir muchos trabajadores y personas de otros lados, desde entonces el robo de autopartes y a casas incrementó”, denuncia Flores.
Añade que cada vez es más común ver autos en ladrillos e incluso en mayo hubo una fiesta donde se escucharon detonaciones de arma de fuego.
“Después de los disparos, marqué al 911, la policía llegó pero sólo prendió su torreta y se fue a los dos minutos”, refiere el entrevistado.
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Protesta vecinal
Desde el mes de abril se ha incrementado la inseguridad de la colonia Parque San Andrés, por lo cual, vecinos de la calle Antigua Taxqueña tomaron la decisión de bloquear el paso vehicular en el cruce con Virginia como medida de protesta.
Reporte Índigo informó anteriormente que los habitantes de la calle Antigua Taxqueña sufrieron el robo en 20 viviendas
Los colonos esperaban que con el cierre de la vía se redujera la incidencia delictiva, pero ésta aumentó a pesar de la protesta.
Hasta el martes 11 de junio, mantenían una reja y una lona con la leyenda “Disculpen la molestia calle cerrada”, pero la policía llegó y la retiró.
Una vecina de la calle, quien prefirió el anonimato, afirma que los oficiales llegaron de manera violenta y sin tener la intención de negociar o mediar palabra.
“Llegaron en la mañana en dos patrullas, se bajaron y nos dijeron que había una denuncia en el 911 por daños a la carpeta asfáltica y que iba a retirarlo”, acusa.
Los oficiales querían llevarse detenidos a dos trabajadores que estaban colocando postes al otro extremo que no estaba enrejado.
“Quisieron llevarse detenidos a los trabajadores pero nosotros los resguardamos para que no se los llevaran, aunque estaban insistiendo e incluso llamaron refuerzos”, expresa.
Tras quitar las rejas, los policías se retiraron y dejaron a dos uniformados quienes presuntamente iban a apoyar en labores de seguridad, pero retiraron lo que quedaba.
Los policías que se quedaron como “premio de consolación”, acabaron de tirar la lona y llevarse lo restante.
“Nos dijeron que como favor, no iban a llevarse la lona para que la volviéramos a poner”, afirma.
Los vecinos han intentado cerrar calles con rejas como medida preventiva, pero debido a que es una acción ilegal las autoridades las retiran
La mujer denuncia que los policías nunca han actuado de la misma manera para evitar los asaltos o los robos a casa habitación.
La comunidad de Parque San Andrés acusa que la actitud policial se debe a que está próxima la inauguración de la plaza comercial de la zona, misma que rechazan.
