El trabajo a distancia trajo consigo un reto con el que las empresas mexicanas deben lidiar: retener a los talentos en Tecnologías de la Información (TI), pues ahora su campo laboral es el mundo.
Manage Engine realizó un estudio para conocer la situación de los Tomadores de Decisiones en Tecnologías de la Información (ITDM, por sus siglas en inglés) en México, el cual mostró que, además de interesarse en las prestaciones extra que ofrece una empresa, buscan que la compañía les permita el desarrollo, aprendizaje y además invierta en conocimiento.
De acuerdo con el estudio, 49 por ciento de los ITDM renunciaría a su trabajo si la empresa deja de ofrecer formación técnica, 44 por ciento lo haría si el aumento salarial no es en función de la inflación y para 43 por ciento el modelo de trabajo flexible es imprescindible.
“He visto mucha gente que dice que si el trabajo no es de forma remota rechaza la vacante, además, no hay personal totalmente capacitado para los roles que se deben realizar, la rotación radica en la oferta de prestaciones”, señala Andrés Mendoza, Regional Technical Manager de Manage Engine.
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De acuerdo con el especialista, la inversión de recursos entrenamiento técnico es algo que las empresas deben considerar, pues asegura que la rotación de personal relacionado con TI es un problema global. “La tendencia indica que una persona entra a un trabajo, se queda tres meses y luego toma la decisión de salirse, pues la demanda de personal relacionado con TI es alta.
Puede trabajar desde casi cualquier lugar para una empresa al otro lado del mundo”. Por lo tanto, asegura que el reto para las empresas es cómo buscar recursos personales comprometidos con la organización para evitar el “jumping”. “Hemos visto que áreas de desarrollo de software son las que tienen más problemas de rotación de personal, pues el programador puede trabajar desde su casa, y es que de pronto la repetición de tareas o la falta de comunicación entre el equipo genera la ruptura y salida de personal”.
Para fomentar que los talentos se queden en la organización y evitar la fuga de talentos, Andrés Mendoza considera que parte de la solución es que las empresas encuentren personas comprometidas, con una base ética, “que tengan habilidades blandas.
“En India, cuando el rol que buscamos llenar no requiere de experiencia, lo que hacemos es buscar talento en las escuelas y pagarle durante dos años por estudios técnicos, es decir, le enseñamos algo técnico que le va a permitir decidir si quiere desarrollarse en áreas técnicas o comerciales”.
En esos dos años el talento aprende a programar de acuerdo con los estándares de Manage Engine. “La selección de aspirantes se basa en el recurso humano, las habilidades blandas son muy difíciles de enseñar, ésas son las que nos interesan. Nosotros nos enfocamos en enseñar las habilidades técnicas”, concluye.
