Casi ocho años después de que la naturaleza, por medio del huracán Alex, le diera una lección a los regiomontanos, se revive un plan de infraestructura para aprovechar el cauce del río Santa Catarina, pese a los serios riesgos que eso implica.
A partir de ese fatídico 2010, autoridades de Nuevo León y la iniciativa privada buscan utilizar las zonas aledañas al afluente, convertido hoy en un codiciado tesoro, que podría tener ganancias millonarias, pero ante un costo de desafiar a la naturaleza.
Antes de la llegada de Alex que dejó 51 víctimas mortales a su paso, el cauce del río Santa Catarina estaba concesionado a particulares, pues se habían construido áreas deportivas y recreativas. Tras el paso del huracán no quedó nada.
Actualmente existe un proyecto del sector privado denominado Acuavía, encabezado por Grupo 4S y Architecture Development Agency, entre otras firmas, las cuales buscan una rehabilitación que incluye parques públicos temáticos con una construcción que ellos han denominado como un plan biodegradable y desmontable.
El pasado 13 de marzo, el Tribunal Superior de Justicia aprobó realizar una consulta ciudadana el 1 de julio sobre la viabilidad de proyectos en torno al afluente, el cual está condicionado a que no obstruyan el paso del cauce.
El ecologista, Guillermo Martínez Berlanga, calificó de demencial que se trate de explotar las zonas del torrente, pues explicó que a la naturaleza no se le puede desafiar para hacer negocio.
“Es un proyecto demencial, es un proyecto de locos, voraces, de gente que no tiene ningún escrúpulo ético y moral, quieren hacer negocios con bienes públicos y de la nación, te pongo el ejemplo del Parque Fundidora, la Pastora y el río la Silla”, criticó.
“El río Santa Catarina es un ecosistema integral, hay más de 300 especies vivas entre flora y fauna, algunas endémicas como la garza blanca, eso debería ser suficiente para ni siquiera voltear a verlo”, dijo Martínez Berlanga.
El ecologista expuso la importancia del afluente, el cual sirve como válvula de seguridad contra lluvias atípicas y ciclones, además de que se auto limpia, evitando olores fétidos en las zonas aledañas.
Recientemente, el municipio de Monterrey arrancó obras en las canchas en el cauce del río, pero días después aseguró que eran trabajos de limpieza.
Conagua se opone a obstrucción
La Comisión Nacional del Agua (Conagua) no permite por reglamento la construcción de estructuras que obstruyan el cauce del río Santa Catarina, esto para mantener el equilibrio ecológico en la zona.
La dependencia federal ha revocado concesiones a particulares para la explotación del uso del lecho.
En el artículo 188 de la Ley de Aguas Nacionales se faculta al organismo para demoler cualquier estructura u obra que afecte el cauce del afluente.
“La Comisión, notificará la resolución respectiva, y en su caso, procederá a remover o demoler las obras o estructuras a cargo del infractor”, señala el artículo.
La Conagua exige la conservación y mantenimiento de los cauces de los ríos y evitar invasiones por asentamientos humanos irregulares.
De igual forma prohibe la edificación de toda clase de obras y construcciones definitivas que puedan obstruir el flujo de las aguas, modificar el curso de las mismas, alterar en forma parcial o total las zonas hidráulicas existentes.
No será fácil utilizar afluente
El diputado de Movimiento Ciudadano, Samuel García, consideró que no será fácil utilizar el río Santa Catarina para uso recreativo, por lo que se tendrían que hacer estudios serios.
“No es tan sencillo, el río Santa Catarina es complejo, es una cañada, no podemos ser simplista y decir que vamos a poner canchas, no se puede hacer de esa manera, por eso lo estamos sometiendo a una consulta pública, que la ciudadanía decida si quiere o no como recreación”, explicó el político.
García criticó al alcalde de Monterrey, Adrián de la Garza, por talar árboles de una zona cercana al río, lo que calificó como una tontería. “Ahorita está todo terroso y llanero un gran pedazo por el centro de Monterrey, tenemos que ser muy cuidadosos, tenemos que preguntar primero a la gente, si quiere o no”.